Europa enfrenta un repunte acelerado del virus de la gripe A(H3N2), situación que ha llevado a que hospitales y centros de salud retomen el uso obligatorio de cubrebocas como medida preventiva en España. El aumento de contagios y la presión sobre servicios clínicos encendieron las alertas sanitarias en varios países del continente, según información de El País.
Aunque la disposición aplica únicamente en espacios de atención médica, el comportamiento del virus y su avance temprano han despertado preocupación internacional, especialmente por la circulación de variantes que podrían presentar mayor resistencia.
Repunte del A(H3N2): el virus que obligó a reactivar medidas
En regiones de España y otras zonas de Europa, autoridades de salud confirmaron que el aumento de casos de influenza —particularmente del subtipo A(H3N2)— superó los umbrales epidemiológicos habituales. Ante esto, varios hospitales reimpusieron el uso de mascarilla para personal, pacientes y visitantes.
El objetivo es frenar contagios en áreas críticas, donde ya se observan incrementos de consultas por infecciones respiratorias y una temporada “adelantada” respecto a años anteriores.
La amenaza científica detrás: un virus capaz de sobrevivir a la fiebre
Paralelo al repunte, una investigación internacional dirigida por las universidades de Cambridge y Glasgow, publicada en la revista Science, revela datos que añaden preocupación: los virus de la gripe aviar poseen un gen que les permite resistir temperaturas superiores a las de la fiebre humana, uno de los mecanismos clave del organismo para detener infecciones.
El estudio, realizado con cultivos celulares y modelos de ratón, identifica que este gen habría estado involucrado en pandemias pasadas —1957 y 1968— y que su capacidad de resistencia podría facilitar el salto y la supervivencia viral en humanos.
Los virus de gripe estacional —principalmente influenza A— suelen replicarse en las vías respiratorias superiores, donde la temperatura ronda los 33°C, y la fiebre (que eleva el cuerpo hasta 41°C) detiene parcialmente su replicación. Pero los virus aviares, acostumbrados a temperaturas entre 40°C y 42°C en aves como patos y gaviotas, son mucho más resistentes al calor, lo que podría complicar futuros brotes.
Qué implica para esta temporada y por qué importa para México
Aunque el repunte europeo está ligado al A(H3N2) estacional y no a una variante aviar, los datos científicos subrayan la importancia de vigilar mutaciones y fortalecer campañas de prevención.
Para México, especialistas recomiendan:
- Mantener al día la vacunación contra influenza.
- Usar cubrebocas en espacios médicos si hay síntomas respiratorios.
- Extremar higiene de manos y ventilación.
- Evitar la exposición en caso de fiebre o signos de infección.
La situación europea funciona como una advertencia temprana sobre la evolución de la gripe y la necesidad de reforzar medidas básicas para contenerla