La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de México y el Departamento del Tesoro de Estados Unidos identificaron a siete personas y cuatro empresas señaladas como operadores financieros —incluidos responsables tecnológicos— del grupo criminal venezolano conocido como el Tren de Aragua, cuya presencia en territorio mexicano ha comenzado a documentarse.
De acuerdo con la UIF, una de las personas ubicadas en el país ya fue incorporada al Listado de Personas Bloqueadas, lo que le impide realizar cualquier operación dentro del sistema financiero mexicano. La medida forma parte de una estrategia conjunta con autoridades estadounidenses para frenar el avance de la organización criminal catalogada por Washington como “narcoterrorista”.
Además, la Secretaría de Hacienda informó que existe una denuncia formal ante la Fiscalía General de la República (FGR) por el uso de empresas fantasma que habrían funcionado como fachadas para facilitar operaciones del Tren de Aragua en México.

¿Qué es el Tren de Aragua?
Originado en Venezuela, este grupo delictivo ha ocupado espacios de poder dejados por el régimen de Nicolás Maduro, ampliando su presencia en Sudamérica con una violencia extrema comparable a la ejercida en México por el Cártel Jalisco Nueva Generación. Sus operaciones se han extendido a Ecuador, Chile, Perú, Colombia y Estados Unidos. En el caso de Perú, el país se ha convertido en plataforma de salida de droga hacia Norteamérica. México, por su ubicación geográfica, es considerado un punto estratégico para la estructura delictiva.
“La UIF realiza labores para establecer su ubicación en territorio nacional y, conforme a sus atribuciones, proceder a su incorporación al Listado de Personas Bloqueadas, la presentación de la denuncia correspondiente ante la FGR y la emisión de alertas al sector financiero”, señaló Hacienda en un comunicado.
Tren de Aragua con presencia en la CDMX
La posible instalación de nodos operativos del Tren de Aragua en la Ciudad de México ya había sido advertida por autoridades de seguridad, que detectaron indicios de que la capital funcionaba como centro de toma de decisiones para sus actividades criminales.
Hacienda destacó que estas acciones forman parte de la cooperación permanente con el Departamento del Tesoro y buscan fortalecer los mecanismos de inteligencia financiera, desarticular estructuras de lavado de dinero y blindar al sistema financiero frente a organizaciones transnacionales.

