La Cámara de Diputados avanzó en la aprobación de la Ley de los Impuestos Generales de Importación y Exportación, que impondrá aranceles de entre 7% y 50% a más de mil 400 productos provenientes de países como China, India y Vietnam.
La Comisión de Economía, Comercio y Competitividad de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen de la nueva Ley de los Impuestos Generales de Importación y Exportación, una reforma clave que establece nuevos aranceles para países con los que México no mantiene tratados comerciales.
La propuesta —impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum— será discutida en el pleno el próximo miércoles.
La medida impactará 1,463 fracciones arancelarias, principalmente de sectores altamente expuestos a prácticas de competencia desleal o importaciones de bajo costo. Entre los productos alcanzados se encuentran textiles, calzado, autopartes, plásticos, acero, electrodomésticos, juguetes, muebles, vidrio, motocicletas, jabones y cosméticos.
Los nuevos aranceles oscilarán entre 7% y 50%, según el tipo de mercancía.
Países afectados por los nuevos aranceles
El ajuste recaerá sobre importaciones procedentes de países sin acuerdo comercial con México, entre ellos:
- China
- Corea del Sur
- India
- Vietnam
- Tailandia
- Brasil
- Indonesia
- Taiwán
- Nicaragua
- Emiratos Árabes Unidos
- Sudáfrica
Estos países concentran gran parte de los productos que compiten directamente con la industria nacional.
Sectores más afectados
Del total de fracciones impactadas:
- 398 corresponden al sector textil
- 308 al de vestidos
- 248 al siderúrgico
- 41a autopartes
La reforma también cubre productos como automóviles ligeros, electrodomésticos, artículos para el hogar, muebles, motocicletas y plásticos.
Proteger empleos y recuperar competitividad
El Ejecutivo federal estima que los nuevos aranceles permitirán proteger más de 320 mil empleos en estados como Nuevo León, Jalisco, Estado de México, Ciudad de México y Querétaro, donde la competencia con mercancía importada ha erosionado la producción local.
El dictamen señala que la medida busca reorientar la política industrial, sustituir importaciones y recuperar sectores debilitados por productos que “no reflejan los costos reales del comercio”, una referencia directa a prácticas de dumping.