A más de un día del descarrilamiento del Tren Interoceánico en Oaxaca, una de las principales interrogantes gira en torno a la localización y análisis de la llamada “caja negra”, pieza clave para esclarecer las causas del accidente.
Mientras continúan las investigaciones, autoridades federales han detallado el estado de los peritajes y las acciones en curso. Las indagatorias se desarrollan junto con autoridades estatales de Oaxaca, la SICT, la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario y la Secretaría de Marina.
Avances de la FGR en la investigación
La Fiscalía General de la República informó que ya se realizan diligencias específicas relacionadas con la caja negra del tren, conocida técnicamente como pulser. De acuerdo con el comunicado, estas actuaciones forman parte de las inspecciones ministeriales y periciales que se llevan a cabo bajo estrictos protocolos y con respeto a la cadena de custodia.
La dependencia señaló que, además del análisis de este dispositivo, se concluyeron las necropsias correspondientes y se mantiene una revisión documental, trabajos de campo, inspección de las unidades ferroviarias y entrevistas a integrantes de la tripulación.
En estas labores participan peritos de la Agencia de Investigación Criminal en 13 especialidades, incluyendo ingeniería civil, seguridad industrial forense, criminalística y tránsito terrestre.
La FGR destacó que el objetivo central de la investigación es esclarecer los hechos con rigor técnico y garantizar la reparación integral del daño a las víctimas, en coordinación con la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas.
En la conferencia matutina de este martes 30 de diciembre, la presidenta Claudia Sheinbaum reiteró que la fiscalía debe realizar primero un dictamen técnico responsable para determinar qué ocasionó el accidente y, posteriormente, deslindar responsabilidades. Subrayó que el gobierno federal mantendrá cercanía con las familias afectadas mientras avanzan los peritajes y se define la reparación integral del daño.