Como parte de las acciones emprendidas tras la masacre en el penal del Topo Chico, las autoridades de Nuevo León realizaron un operativo en otro de los reclusorios estatales también dominado por «Los Zetas».
Se trata del Centro de Readaptación Social Apodaca. Ahí por lo menos 100 policías de Fuerza Civil, Agentes del Ministerio Público y, peritos de la Procuraduría Estatal se constituyeron para iniciar un recorrido por todo el reclusorio ubicado a un costado de las instalaciones de la 7ª zona militar.
Este penal inaugurado el 12 de octubre de 1989, tiene una capacidad para albergar mil 800 reos. En estos momentos se encuentra a su máxima capacidad.
El domingo 9 de febrero del 2012 se registraron disturbios que arrojaron un saldo de 44 reos asesinados a golpes y, la fuga de 37 reclusos… entre los fugados iba su líder, Oscar Manuel Bernal Soriana “La Araña” a quienes las autoridades carcelarias endosaron la autoría de esa matanza.
El 10 de septiembre del 2013, las autoridades estatales revelaron que dentro del Penal de Apodaca se había localizado un túnel.
Se explicó que la perforación era de un metro de alto por unos 50 centímetros de ancho y tres metros de profundidad a nivel del piso, «una longitud aproximada de 10 metros que iniciaba en el área de lavandería, e iba encaminada hacia la barda perimetral del centro penitenciario» revelaba un mando policiaco.
“No hay ninguna situación de alarma en estos momentos, es parte de los operativos que se efectuarán en los tres penales”, dijo el Gobernador Jaime Rodríguez Calderón al ser cuestionado al término de una reunión con alcaldes metropolitanos.
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