A más de tres años de la promulgación de la Reforma Educativa no ha hecho ningún planteamiento educativo, es más bien una reforma administrativa al sistema escolar con un alto componente laboral, señaló Manuel Gil Antón, profesor del Centro de Estudios Sociológicos de El Colegio de México.
La diferencia entre una y otra –explica Gil Antón– es que la reforma educativa tiene una serie de acciones orientadas a la mejoría sustancial de los niveles de aprendizaje de un país, y para ello se requiere un proyecto educativo, una mirada al respecto de cómo construir ciudadanos cultos y críticos.
Al respecto, aun no hay por parte de la SEP un planteamiento de un nuevo modelo educativo, pesé a que el secretario Aurelio Nuño, ha prometido, sigue teniendo un componente de reorganización administrativa del sistema escolar. Un ejemplo sería que México se comprometiera a que se organizaran los planes de estudios de tal manera que no haya ningún niño que al terminar sexto de primaria tenga dificultades para leer o escribir, para cual se tendría que reformar los proceso pedagógicos.
Mientras que una reforma administrativa lo que hace es reorganizar la manera en que la autoridad controla al sistema, preferentemente al magisterio, dado que durante decenios le entregó esas funciones a la cúpula sindical a cambio de beneficios políticos para el gobierno.
“Lo que ha hecho esta administración no ha sido recuperar la rectoría de la educación, lo que ha recuperado es la primacía en la relación corporativa con el de tenor. Eso es algo triste, porque con el nombre de reforma educativa se está cubriendo la reestructuración del viejo PRI corporativo y reorganiza la estructura del magisterio”, señaló Gil.
Detalló que hubo un nuevo arreglo con las cúpulas del CNTE y con quienes no hubo una sola orden de aprehensión y que hacían lo mismo, en la época de Elba Esther Gordillo, que ahora. “Es una justicia selectiva. Cuando un gobierno aplica la justicia cuando le conviene, le falta ética para hacer una reforma educativa. Carece de ética.
El profesor del Colmex, agregó que el gobierno afirma que la resistencia de los maestros es porque quieren seguir heredando sus plazas, pero otra parte de la resistencia es porque la evaluación a la que están siendo sometidos, que no da cuenta de su desempeño cotidiano, está muy separada de la práctica diaria.
Ante el intento de desalojo de un bloqueo carretero en Nochixtlán, Oaxaca donde murieron al menos seis personas y que resultaron heridas al menos 45, Gil Antón aseguró que cuando se llega a la violencia se está ante una de las peores situaciones en las que puede estar un país, porque significa el fracaso de la política.
El profesor dijo que el panorama es complejo y poco alentador, pues podría agudizarse la violencia o también abrirse canales de dialogo con el magisterio para evaluar la reforma y ver que cosas puedan mejorar.
“México si necesita una reforma, es tiempo de la política, de la intervención del Congreso quien fue quien promulgó la Reforma Educativa”, indicó el especialista.
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