Las tormentas de la semana pasada dejaron afectaciones en el área metropolitana de Monterrey, pero impactaron poco en las presas de la entidad y, de hecho, el nivel de los embalses siguen en picada.
En un comparativo entre la semana pasada (fecha 3 de junio) y el más reciente reporte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) a las 06:00 horas del domingo, es fácil darse cuenta que los niveles han disminuido.
La Boca pasó del 40.90% al 39:59%. Cerro Prieto bajó del 5.65% que tenía a inicios de la semana pasada al 5.33% y El Cuchillo disminuyó su nivel del 32.89% al 32.37%.
No obstante que para el domingo se pronosticaron lluvias e intervalos de chubascos con actividad eléctrica y posible caída de granizo, especialmente en la zona montañosa, la verdad es que la lluvia no está cayendo donde debe, consideró el hidrólogo Mauricio Santos.
“De poco o nada nos sirve que caigan tormentas en el área metropolitana, realmente necesitamos una lluvia torrencial en el área de las presas”, expresó.
—¿Cuál es la verdadera situación de las presas?
“Últimamente no se ha mencionado tanto el tema de los niveles de las presas que está bajando, pero la realidad es que son datos que no se pueden maquillar. Uno mismo pueden constatar cómo está faltando el agua”.
—¿Hay peligro de otra crisis hídrica en el estado?
“Es una posibilidad que está latente. Hay que recordar que el verano está a la vuelta de la esquina y todavía nos faltan dos olas de calor. Eso, sin duda, va a incrementar el consumo de agua y no sería extraño que volviéramos a vivir una situación parecida a la de 2022.
“Sí es apremiante que llueva en el área de La Boca, de Cerro Prieto y de El Cuchillo… de hecho en Santiago hubo una tormenta el fin de semana que ahora está dejando escurrimientos y eso es muy benéfico”.