Lo que comenzó como una aventura divertida pudo haber terminado en tragedia cuando el regiomontano Guillermo Lozano, de 27 años de edad, quedó atorado en una palmera después de pasear en paracaídas.
El percance ocurrió dentro de las instalaciones del condominio Quinta del Mar en Bahía de Banderas, Puerto Vallarta.
El incidente fue grabado por cientos de turistas que veían con ansiedad cómo Lozano pudo haber sufrido heridas graves en otras condiciones, por ejemplo, si hubiera habido un viento más fuerte o si no se hubiera atorado en la planta de aproximadamente 8 metros de altura.
Sano y salvo
Excepto por el golpe y uno que otro rasguño, provocado por el choque contra el tronco áspero de la palmera, Lozano fue rescatado sano y salvo.
Protección Civil de Bahía de Banderas intervino para bajar al regiomontano de lo alto de la planta.
Presuntamente una maniobra errónea provocó el choque.
Lozano recibió una valoración médica y no requirió el traslado a un hospital.
José de Jesús Negrete González, de Protección Civil municipal fue el encargado de asegurar al hombre con cuerdas.
El oficial de los bomberos Manuel Alba fue el encargado de coordinar el rescate.
Anteriormente, pero en Acapulco una mujer que también practicaba el paracaidismo fue llevada por los fuertes vientos y quedó atorada en un poste de luz.
Afortunadamente las personas que seguían la trayectoria del paracaídas lograron rescatarla sin un solo rasguño.
Tras el incidente de Lozano los usuarios de redes sociales bromearon tras darse cuenta de que no había sufrido daños.
“Ya que andaba allá arriba hubiera bajado unos cocos”, comentaron algunos internautas.
Otros señalaron que seguramente el accidente se debió a la falta de pericia del regiomontano que no supo maniobrar con el paracaídas.
“Aunque parece muy sencillo no lo es, hay que tener mucha fuerza para poder controlar el paracaídas y caer exactamente donde debes, además hay que batallar con los vientos que a esas alturas son muy fuertes”, comentaron usuarios de Facebook.