Nuevo León

De moda en Monterrey: tortas de “milanesa de pollo” hechas con papel sanitario

Se viraliza la venta de este producto en puestos callejeros del Centro de la ciudad

El sabor, dicen, es prácticamente el mismo salvo que al final se puede notar la diferencia.
El sabor, dicen, es prácticamente el mismo salvo que al final se puede notar la diferencia. Foto: IA

En Monterrey no es extraño encontrar, prácticamente en cada esquina, especialmente en el Centro de la ciudad, diferentes puestos de comidas que ofrecen desde tacos, hamburguesas y frituras, pero en las últimas semanas se ha vuelto tendencia una modalidad que deja con la boca abierta: tortas de “milanesa de pollo”, pero que en realidad son hechas con papel de baño.

Lo insólito es que este producto que solamente cuesta 30 pesos la pieza ha tenido gran aceptación entre los consumidores que, camino a su trabajo, buscan una opción barata para desayunar o comer.

Sin embargo, nadie sabe que en realidad lo que están consumiendo puede afectar su organismo y provocar enfermedades.

Hasta el momento las autoridades sanitarias de Nuevo León no se han manifestado al respecto, aunque el consumo de este producto podría generar padecimientos gastrointestinales porque además las condiciones en las que se venden las tortas no son las más adecuadas.

Lo más extraño es que a pesar de que ya a través de las redes sociales los videos sobre estas tortas se han vuelto muy populares la gente la sigue consumiendo, quizá por curiosidad sin saber que su salud podría verse afectada porque no se sabe en realidad qué tipo de papel están utilizando los vendedores.

¿Cómo se prepara?

La venta de estos productos se volvió viral a través de redes sociales, incluso algunos influencers compartieron la “receta” para preparar la torta de “milanesa de pollo” hecha con papel sanitario, pero siempre recomendando que esto no debe realizarse en casa.

Primero, se toma una porción de papel sanitario que no tenga aroma, se bate el huevo y se baña el papel por un lado y por el otro, sazonando con sal y pimienta. Posteriormente se empaniza con harina y se fríe en aceite bien caliente.

Los influencers coinciden en señalar que el sabor después de freír es muy similar a milanesa de pollo aunque al final del bocado persiste cierto sabor a papel.

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