De acuerdo a la Secretaría de Salud de Nuevo León las evaluaciones preliminares realizadas a vecinos de zonas reportadas con altos niveles de contaminación, como en el área de la empresa Zinc Nacional, no se reporta una relación causa-efecto con todos los padecimientos que pudieran presentar los habitantes.
“Quizá en el tema donde se ha observado un poco más de esta correlación es en la hiperreactividad bronquial, que se presenta en algunos pacientes pediátricos. Pero en el resto no se tienen datos contundentes de una relación causa- efecto con relación a Zinc Nacional”, expresó Alma Rosa Marroquín, titular de la dependencia, quien participó en la Glosa por el Cuarto Informe de Gobierno.
Al ser cuestionada por el tema de la contaminación ambiental, señaló que es una situación que se ha estado trabajando en conjunto con la Secretaría del Medio Ambiente.
“Sin embargo, más allá de las atribuciones en materia de salud ambiental, nosotros nos preocupamos por los ciudadanos de Nuevo León, es así que gracias a la coordinación que se ha hecho con diferentes instituciones se están trabajando en protocolos de investigación para identificar la posible causalidad de enfermedades respiratorias, producidas por la contaminación ambiental, como la presencia de plomo y algunas otros sustancias en la sangre de las personas.
“Tenemos dos estudios que actualmente se están desarrollando, uno de ellos en los centros de salud que están cercanos a las estaciones de monitoreo ambiental, y que están midiendo de forma permanente los niveles altos de partículas PM2.5 PM10, y la correlación que pudiese presentarse con enfermedades como asma, conjuntivitis, hipertensión, infarto y también eventos vasculares cerebrales”.
Asociaciones contaminación-enfermedades
Derivado de estos proyectos de investigación, añadió Marroquín, se han identificado en algunos casos ciertas asociaciones, pero que no son permanentes.
“Es decir, se presenta el incremento de los niveles atmosféricos y una semana después pudiésemos identificar algún riesgo de enfermedades respiratorias, cuando se hace un protocolo de investigación para identificar causalidad”, añadió la funcionaria, “se tienen que considerar factores adicionales”.
Señaló que en este caso, los cambios de temperatura, las características propias de las personas y las familias, enfermedades, además del estado físico, general, son tomadas en cuenta.
“Y después de este análisis podemos determinar si existe una correlación real o no estamos todavía en ese proceso directamente”, añadió.

