Profundo y justificado orgullo por la UNAM

La Universidad de México se fundó a mediados del Siglo XVI, hasta 1910 incorporó la palabra nacional a su nombre y hasta 1929 se le otorgó la autonomía. Esta evolución muestra que se trata de una de una institución dinámica que se ha desarrollado a lo largo del tiempo con las más diversas ideas, pero siempre en la búsqueda de aportar al conocimiento y la cultura mexicana.

UNAM significa universalidad y pluralidad tanto en las disciplinas en las que imparte educación, como en su labor en la investigación científica y humanística o como difusora de todas las expresiones culturales. Su carácter público, popular y solidario la hace única, ya que su comunidad está formada por más de 400 mil personas, entre las que se encuentran 367 mil estudiantes desde el grado preuniversitario hasta doctorado, imparte más de 130 licenciaturas, cuenta con casi 13 mil profesores de tiempo completo, además de los de asignatura y miles de académicos que colaboran en medio centenar de institutos y centros de investigación de alto nivel. Por eso, ocupa el lugar 105 entre las mejores del mundo.

Estos son solo algunos datos de lo que representa la UNAM. Es una institución compleja y plural como la sociedad mexicana misma, con la diversidad que nos caracteriza como país. Para que una comunidad tan amplia y diversa pueda funcionar es esencial que lo haga con libertad, en donde convivan todas las formas de pensar por igual.

Esa es la vía para que la UNAM siga siendo la Máxima Casa de Estudios por la cual sentimos un profundo y justificado orgullo, en la que se sintetizan los valores, principios e identidad de los mexicanos, como reza su lema: “Por mi raza, hablará el espíritu”.