• María Elena Álvarez-Buylla lo hizo otra vez. Pese al encono que causó José Romero, la directora general del Conacyt lo designó director del CIDE. Lo esperable es que su administración sea un infierno porque vaya que chocó con la comunidad. ¿Acaso le valió ser el elegido por la simple razón de que despotrica contra el “neoliberalismo”?
• Diputados trabajadores... Ahora resulta que los legisladores salieron taaaaan trabajadores que las comisiones ya no ven lo duro, sino lo tupido del trabajo legislativo. El presidente de la Jucopo, el priista Rubén Moreira, informó que de septiembre a la fecha los diputados de la 65 legislatura presentaron un promedio de mil iniciativas y afirmó que en toda la 64 legislatura presentaron un promedio de 6 mil... la duda es si hay calidad o sólo presentan iniciativas por convivir.
• Rogelio Ramírez de la O y la terracería. Resulta que el secretario de Hacienda acompañó al presidente Andrés Manuel López Obrador en su gira por Oaxaca. Pero cuando el mandatario decidió bajarse de su vehículo para acercarse a la gente, el titular de la SHCP optó por seguir en su camioneta. “Es mucho pueblo para él”, dijo el presidente. “Excelente ambiente laboral”, es la leyenda para quienes buscan trabajo en la 4T… dicen.
• Medicinas, ¿ahora sí la solución? Nos cuentan que a marchas forzadas se trabajó con la Sedena para pulir el plan de distribución de medicinas que harán militares, sí, adivinó usted. Todo está listo para anunciar la estrategia…