Opinión

Sonido, música y movimientos para sanar

Foto: Pixabay

Todo el cosmos está impregnado de música, sonido y movimiento que forman un todo unificado. Existe una Ley que rige la relación entre las palabras sagradas y la música, o los sonidos. La música puede ser tan poderosa, que el ritmo de ciertos tipos de música, hace que la persona entre en contacto con las fuerzas sagradas, creativas y puras de la naturaleza.

Los diferentes ritmos de músicas armoniosas y sacras, incitan a realizar movimientos corporales que infunden armonía, ritmo, y generan figuras geométricas invisibles, pero presentes en esas fuerzas. Realizar estos movimientos o danzas sagradas, hace que el cuerpo sea saludable, brillante y hermoso.

Los antiguos místicos sabían que, mediante la combinación de palabras sagradas, música y movimiento, se podían despertar poderosas fuerzas ocultas en las palabras y la música, y aprendieron a aprovecharlas a través de movimientos rítmicos que correspondían a figuras geométricas específicas, y las combinaron con palabras sagradas vibrantes para generar manifestaciones muy benéficas.

La Creación se basa en ritmo y armonía. Las palabras y la música impactan directamente en nuestra esencia y activan nuestra fuerza física y espiritual. La combinación inteligente de palabras, tonos y movimientos sagrados, puede tener un efecto curativo milagroso sobre el cuerpo humano, los pensamientos y las emociones.

En las antiguas escuelas esotéricas, los cantos místicos iban también acompañados de movimientos. Cuando logramos hacer una combinación precisa de palabras sagradas con música y movimientos, se dice que abrimos las puertas a la curación, y a nuevas capacidades creativas y creadoras.

Así como los infantes, que cantan, hacen sonidos, bailan y se mueven intuitivamente, sin pena, sin censura, podemos retomar esas formas de conexión con la sabiduría divina, con la inteligencia suprema, con Dios, como un niño clamando por el Amor Divino, la misericordia y las bendiciones de su Madre y Padre.

Cuando conectamos con la naturalidad y pureza del corazón, y pronunciamos palabras con devoción y completa humildad, las bendiciones tienen un espacio para manifestarse. En la Yoga ancestral y, en la actualidad, en muchas técnicas de mindfulness, bienestar y empoderamiento, la postura física es tremendamente importante, pues es el reflejo de la postura mental y emocional, así como también la postura del cuerpo ayuda a la actitud mental.

Por esto es que se trabaja mucho en la alineación de la columna vertebral, pues la columna nos sostiene, es el centro de nuestro templo sagrado y un canal de energía física y espiritual. En tanto la columna está lo más derecha posible hacia el cielo cuando estamos sentados en oración o meditación, se dice que es mucho más fácil penetrar en las dimensiones superiores de la naturaleza.

Las diversas posturas de la práctica de Yoga, por ejemplo, hacen que el cuerpo se refuerce con energía pránica, chi, o flujo vital. Si estas se combinan con el sonido de mantras, música sagrada, respiraciones conscientes, y palabras devocionales, se pueden sanar y relajar las células, los músculos, órganos y sistemas del cuerpo, liberando la energía estancada, para vigorizar y rejuvenecer.

Es vital que en estos tiempos, no deje usted de moverse, de conectarse con lo supremo por medio de la música, de construir con palabras y decretos positivos, y de integrar el ritmo a su vida, en sintonía con lo más elevado.

DV Player placeholder

Tags


Lo Último