Por supuesto que sí. Querámoslo o no estamos pasando por una crisis severa, pero no una crisis cualquiera, sino de esas que impacta directo en el bolsillo del pueblo de México que, a pesar del discurso repetitivo del aumento en el salario mínimo, ello no ha sido suficiente para paliar la terrible inflación que vivimos como hace 30 años no pasaba y que, además, se va recrudeciendo con cada día que pasa por la falta de certeza en materia financiera en nuestro país.
A esa terrible situación económica debemos agregarle el gasto irracional en obras de infraestructura que de poco o nada servirán para aumentar la confianza en el país y, sobre todo, para resolver problemas de la ciudadanía, convirtiéndose en un peso que debimos haberlo pausado a la espera de contar con un mejor panorama económico.
Por si fuera poco, esa decisión de incumplir el TMEC representaría para México la pérdida de entre 10 mil y 30 mil millones de pesos a través de aranceles lo cual, en realidad, podría representar pérdidas mayores porque colapsaría sectores económicos que dependen del intercambio de mercancías con los Estados Unidos de América y Canadá.
Además, el fondo se vería severamente lastimado, ya que debemos considerar que, al día de hoy, México es el principal socio de EU a nivel mundial, por lo que mantener esa postura intransigente puede generar una grieta irreparable en una relación de la que se benefician ambos países pero que en México el impacto sería mayor ante los altos índices de pobreza y el mal manejo económico de los últimos años.
Preocupa además que en nuestro país la Leyes, los Tratados Internacionales y la Constitución se conviertan en letra muerta por decisiones unilaterales que no tienen ni fundamentación ni motivación alguna más que la idea “patriotera” que no se puede mantener en un mundo global y en un momento histórico en que ningún país puede salir adelante solo.
Estas decisiones pareciera que posicionan a un gobierno en una postura férrea contra un país extranjero, sin embargo, lo que en realidad sucederá es que el pueblo de México sufrirá peores embates para poder desarrollarse económicamente y para dar a las familias el sustento mínimo para una vida digna. Yo diría que es muy preocupante.