Opinión

Chile: elecciones del rechazo

Trabajadores electorales durante plebiscito sobre el borrador de una nueva Constitución en un centro de votación en Santiago, Chile, el 3 de septiembre de 2022. (AP Foto/Luis Hidalgo) (Luis Hidalgo/AP)

Después del rechazo en las urnas del proyecto de Constitución para Chile, el país se encuentra digiriendo lo sucedido y definiendo una nueva ruta que permita cumplir con lo que se le prometió a la población en 2019 cuando se realizaron violentas manifestaciones de jóvenes para rechazar los aumentos al transporte y las consecuencias del modelo económico, mismas que causaron por la represión del ejército ordenada por el expresidente Piñeira, la muerte de por lo menos 18 personas.

El documento que se rechazó contenía algunas novedades en materia de derechos humanos, como reconocer a los pueblos originarios indígenas, el derecho al aborto como derecho fundamental y la protección al medio ambiente, sin embargo, se dice que mantenía el mismo modelo económico que en general ha causado la mayor desigualdad dentro de la sociedad.

El rechazo fue general en todas las zonas del país, pero llama la atención que el mayor porcentaje del No se presentó en la votación de las zonas en donde existe mayor pobreza.

En principio el resultado se puede ver como un golpe al presidente de izquierda Gabriel Boric que apenas tiene 6 meses en el gobierno y había prometido la nueva constitución desde su campaña, a pesar de ello fue el primero en reconocer y respetar los resultados.

El 62% de los más de 11 millones de ciudadanos que participaron, dijeron no y rechazaron la nueva carta magna. El presidente convocó a los lideres del Congreso para poder establecer una nueva ruta que defina un nuevo proyecto, los lideres del Senado y de los Diputados han manifestado que el pueblo quiere unidad y acuerdos políticos para que se puedan definir los cambios al viejo régimen y que por ello trabajaran junto con el Boric de 36 años, para lograrlo.

Muchas son las lecciones que nos deja este episodio chileno, pero destacan tres: A pesar de la división social la consistencia de los resultados en todas las regiones del país respecto del rechazo mayoritario; la madures y vocación democrática de su presidente a pesar de su juventud, que aceptó los resultados sin dramas ni calumnias a nadie “la solución es más democracia” y la madures de la oposición en el Congreso que reconocen la voluntad popular y deciden trabajar juntos para encontrar nuevas rutas, y así lograr la nueva constitución que incluya todas las voces y sea aceptada por el pueblo.

Falta ver si se logran los acuerdos y finalmente que se propondrá, pero en principio las señales indican que mientras se repete a la democracia y la ley, se puede tener un buen inicio; mientras se escuche al pueblo, no se ofenda al contrario político y se anteponga el bien de la nación sobre los intereses electorales o de grupo, se pueden alcanzar grandes acuerdos. La principal lección es que lo que para ellos es una realidad democrática, para nosotros en México es una lejana esperanza.

* Las declaraciones y opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de quien las escribe y firma, y no representan el punto de vista de Publimetro.

Tags

Lo Último