Defraudadores y apps de préstamos podrían convertirse en estas fechas en el Grinch que se roba la Navidad y la felicidad.
Los datos del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la CDMX indican que este año se han atendido cerca de 8 mil casos de fraude y más de 11 mil de montadeudas.
En la estafa, las modalidades más comunes, y cuya frecuencia aumenta en esta temporada, son la compra venta por internet, el engaño del supuesto pariente que llega de visita y tiene una urgencia económica, y el phishing.
La predisposición a buscar la alegría personal o de seres queridos a través de la entrega de regalos o la convivencia puede llevar a la búsqueda de ofertas o medios de financiamiento, lo que es aprovechado por delincuentes para desarrollar estrategias de fraude, robo de datos o cobranza ilegítima.
Regularmente la felicidad, tranquilidad, ausencia de situaciones provocadoras de estrés nos hacen bajar la guardia y ser más propensos a situaciones de riesgo. Los neuropsicólogos Kenneth S.L Yuen y Tatia M.C Lee, de la Universidad de Hong Kong, en su estudio “Could mood state affect risk-taking decisions?” encontraron que las personas con depresión son más conservadoras al asumir riesgos que aquellas en un estado de ánimo neutral o feliz.
De las atenciones del Consejo Ciudadano, a través de la Línea de Seguridad y el Chat de Confianza 55 5533 5533 —que brinda orientación jurídica y psicológica 24/7, gratuita, a todo el país—, la mayoría son para mujeres y personas de entre 26 y 40 años.
Para evitar que los fraudes y montadeudas sean el Grinch es vital reforzar la cultura de la prevención, con medidas como no realizar compras o transferencias en computadoras de uso público, verificar que el sitio web cuente con el protocolo de seguridad https://, la imagen de un candado cerrado y la letra “s”.
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También, no responder mensajes por correo o apps de remitentes desconocidos, así como recordar que ningún banco solicita datos personales a sus clientes o verificación de sus cuentas vía electrónica o por llamadas telefónicas.
En caso de necesitar un préstamo es mejor recurrir al sistema financiero formal y eludir los créditos por aplicaciones que terminan por convertirse en situaciones de extorsión y cobranza ilegítima.
Evitarlos está en cada una y uno de nosotros.