No cambiaste de auto ni dejaste el departamento arrendado por uno propio, no hiciste el viaje a un país muy muy lejano, aún vives en la casa familiar y cuando revisas tus estados de cuenta descubres que todavía pagas el gimnasio al que dejaste de ir desde mediados de febrero.
Ahora que estás en el momento de reflexión sobre lo conseguido y lo que se quedó pendiente de los propósitos —que en algunos casos quedaron registrados en un papel guardado celosamente para abrirse cuando acabara el año— te sorprende lo mucho o poco de lo cumplido.
A unos días de que termine el año, la idea de volver a plantearse retos en algunos casos puede ilusionar y en otros asustar. Fijarse metas requiere esfuerzo y es mejor que no hacer nada.
Lo que muchas veces pasamos por alto es que cumplir los propósitos de Año Nuevo es más que tener predisposición o buena intención, hace falta compromiso y disciplina.
De acuerdo con una investigación de la Universidad de Scranton, el 81% de las personas no puede cumplir sus metas, entre las más comunes: hacer ejercicio, comer saludable, comprar un auto nuevo o casa, bajar de peso, dejar de fumar o beber alcohol, ahorrar, pasar más tiempo con la familia y amistades, aprender cosas nuevas y viajar.
La predisposición a la alegría y un mayor entusiasmo propios de la temporada puede llevar a un exceso de confianza, al planteamiento de objetivos poco realistas o un listado muy grande, que al no cumplirse conducen al desánimo o ansiedad.
En la Línea de Seguridad o Chat de Confianza, 55 5533 5533, del Consejo Ciudadano de la CDMX te ayudamos a procesar esas emociones, a cualquier hora del día, todos los días del año.
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Las metas poco específicas influyen en el riesgo de incumplir. “Hacer más ejercicio” o “comer menos” son ideas muy generales que carecen de aspectos concretos a realizar.
Para que se conviertan en hábitos de largo plazo requieren ser realistas y sostenibles. Regularmente los gimnasios, deportivos o parques están saturados durante enero en comparación con julio; esto se debe a que la mayoría de este tipo de propósitos de salud no son realizables si en el año previo no se hizo mucho ejercicio.
El modelo de objetivos “smart” (en inglés: specific, measurable, achievable, realistic, time) ayuda a dar claridad a los objetivos. Mientras más detallado, mejor; debe haber una forma de medirlo, ser alcanzable, realista y tener un tiempo para su cumplimiento.
Contar con una amiga o amigo o un grupo con los mismos intereses puede incentivar a cumplirlos, y así tener un 2023 de prosperidad.