Han pasado ya muchas semanas desde que se descubrió un presunto plagio en la tesis de la ministra Yasmín Esquivel. Muchos actores han expresado su postura y se ha generado un gran debate público en torno al actuar de la propia ministra y de las autoridades educativas, judiciales y políticas. Igualmente poniendo en tela de juicio el actuar de instituciones de altísimo nivel en nuestro país como lo son la Suprema Corte de Justicia de la Nación y nuestra máxima casa de estudios, la Universidad Nacional Autónoma de México.
La UNAM ha fijado postura en sustento a su autonomía y bajo los más altos principios éticos y morales, sin embargo, se encuentra en una encrucijada por no existir protocolos claros en estos casos y hasta que punto su actuar puede incidir en la revocación de un título y en su caso de una cédula profesional emitida por la Secretaría de Educación Pública, cualquiera que sea la decisión que se tome, marcará un antes y un después en la historia de la UNAM.
Esta penos situación que ha involucrado a estas instituciones, debe abrir el debate para reformar el sistema educativo en nuestro país. No sabemos cuantos plagios han existido en la obtención de títulos profesionales en nuestro país y está en evidencia que los controles al respecto han fallado sistemáticamente durante décadas, por lo que es urgente hacer uso de nuevas tecnologías para evitar que los profesionistas en nuestro país cometan estas infracciones.
En el supuesto de una revocación de título por parte de la UNAM, esta tendrá que revocar igualmente a todos los titulados con la tesis en cuestión y hacer una exhaustiva búsqueda en sus archivos y revocar cuanto título haya incurrido en faltas administrativas, ocasionando quizás una crisis profesional, pero actuando como lo debe hacer una universidad de su prestigio y aceptando que ha fallado en los controles pertinentes.
Seguimos todos expectantes a una decisión final por parte de la UNAM, da la impresión de que actúa a pasos lentos pero seguros antes de tomar medidas en el caso de la ministra Yasmín Esquivel. Muchas decisiones habrán de tomarse una vez que se tome una postura oficial, pero es tiempo de corregir los errores y que nuestra máxima casa de estudios haga valer los principios y valores sobre los que siempre se ha regido.