El “Título 42″ en materia migratoria se refiere a una sección específica del Código de los Estados Unidos que se ha utilizado para justificar las restricciones y políticas migratorias implementadas durante la pandemia de COVID-19.
Bajo el Título 42, el gobierno de los Estados Unidos ha invocado la autoridad de salud pública para aplicar medidas de expulsión rápida y negar la entrada a personas que cruzan la frontera sin documentos.
Estas medidas han permitido al gobierno estadounidense expulsar rápidamente a individuos y familias migrantes, incluidos aquellos que buscan protección internacional, sin brindarles la oportunidad de solicitar asilo o acceder a un proceso migratorio regular.
La justificación detrás de estas acciones es evitar la propagación del COVID-19 en los centros de detención y comunidades fronterizas.
El uso del Título 42 en materia migratoria ha sido objeto de controversia y críticas por parte de organizaciones de derechos humanos y defensores de los migrantes, ya que se considera que viola los derechos y protecciones establecidos en la ley migratoria y en los tratados internacionales de los que los Estados Unidos es parte.
Estas expulsiones expeditas han generado una crisis en la franja fronteriza mexicana por el alto volumen de personas concentradas en un limbo migratorio, ocasionando así situaciones de otras índoles y que ha hecho al gobierno mexicano actuar espontáneamente para intentar procurar la integridad de los individuos que se encuentran en esta situación y de los habitantes de la zona limítrofe en nuestro país.
La situación geopolítica de México siempre ha sido complicada y comprometida por lo que significa ser vecino de los Estados Unidos de América.
Sin embargo, México nunca se ha pronunciado con claridad sobre su postura migratoria, si bien hemos sido un país que reconoce al migrante, no podemos asumir responsabilidades sobre las decisiones de nuestro vecino del norte, sea cual sea su momentum migratorio.