Morena ha demostrado una vez más que es el partido más antidemocrático que existe en México. Según el Acuerdo aprobado por su Consejo Nacional, los actos que desplieguen en sus giras ilegales, deben ser austeros, sin derrochar en gastos publicitarios, sin acarrear y sin coaccionar, sin embargo, han hecho todo lo contrario.
La realidad es que toda esta campaña ilegal ha sido a costa del dinero de los mexicanos, no quieren transparentar los recursos, ni fiscalizarlos, mucho menos, rendir cuentas.
Es claro que no quieren que se sepa de dónde provienen los recursos con los que están pagando la propaganda porque es un descarado despliegue de recursos públicos y de procedencia ilícita.
Llevan cuatro años y medio quedando a deber como gobierno porque siguen en campaña, en concentraciones, en marchas y en informes, utilizando de manera ominosa dinero que no les pertenece.
Mientras las familias mexicanas no tienen los recursos económicos suficientes para comprar alimentos o medicinas, las “corcholatas” de Morena tapizan el país con propaganda ilegal. Hecho que demuestra una vez más lo alejados que están de los problemas que más aquejan al pueblo de México.
Ni todo el dinero que han tirado en espectaculares, en bardas, en lonas, en eventos con movilizadores, les ha servido, porque la realidad es que van mal en las encuestas y a la baja en la preferencia ciudadana.
Su falta de resultados y su negligencia en el gobierno, hoy le están cobrando las facturas a un movimiento que el próximo año, ya se va.
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¿De dónde proviene el dinero que utilizan para sus espectaculares? ¿Será acaso del desfalco al erario que han hecho durante cuatro años y medio de gobierno, o acaso provienen de la delincuencia organizada? Sin duda, una pregunta que deben contestarle a los mexicanos.
El árbitro electoral, deberá emitir los lineamientos para regular y fiscalizar este despliegue ominoso de propaganda. Es urgente que se sepa de dónde provienen los recursos que Morena está utilizando de manera indebida.