“En medio de las armas, las leyes enmudecen.”
Cicerón
Quienes se dicen demócratas en el actual panorama político han dejado de lado la idea de la equidad en la contienda electoral del 2024, que ha sido dispareja y alevosa. La abanderada del oficialismo (Morena y aliados) cuenta con el apoyo del Presidente y de todo el Estado, ya que a la 4T no le ha temblado la mano para despilfarrar recursos públicos en campañas anticipadas ni para quebrantar la ley electoral. Por otro lado, está la representante del Frente Amplio por México (PRI, PAN y PRD), que, si bien no cuenta con los recursos de su contrincante, tiene en su equipo a la vieja maquinaria de impresentables que en la práctica demuestra ser más de lo mismo que critica: autoritarismo e intransigencia… para muestra el botón de lo que están haciendo los parlamentarios en Nuevo León al querer imponer ilegalmente a un Gobernador.
Ambos bandos, tanto el oficialismo como la supuesta oposición intentar crear falsas percepciones. Los primeros intentan hacer creer que la elección presidencial ya está definida y dan por hecho que su candidata ya será la ganadora, mientras que los segundos (ante la ineptitud de sus dirigentes) quieren crear la idea de que las y los actores políticos de Movimiento Ciudadano están jugando del lado de Morena y dividiendo a la oposición.
Recordemos que aún es muy pronto para sacar vísperas respecto a los resultados electorales. Y las últimas elecciones en México nos han demostrado que no necesariamente los electores no son fieles a los partidos: de hecho, según el más recientes estudio de Latinobarómetro México se encuentra dentro de los cinco países más descreídos del sistema político-partidario de América Latina. Ante las crisis económicas y de seguridad, el electorado busca rostros en quienes confiar y que respondan empáticamente a sus necesidades y ante la polarización no podemos descartar fenómenos que cambien el posicionamiento de las fuerzas políticas mexicanas. La ciudadanía es también cada vez más consciente del uso clientelar que se les da a los programas sociales (como si realmente el apoyo lo otorgaran los políticos de su propia bolsa) y de las arbitrariedades que por mantener el poder sigue cometiendo la 4T. Así que el oficialismo no tiene todavía que cantar victoria.
Por otro lado, la alianza PAN-PRI-PRD, ha resultado ser un fracaso electoral y ante su ineficiencia eso lo más sencillo es culpar a Movimiento Ciudadano de esquirol por no unirse a ellos. Su falta de estrategia les ha 23 gubernaturas. En los Congresos estatales se desmorona su proyecto político y cada vez más legisladores se unen a otros partidos…. No sólo se unieron en una incongruencia histórica, sino que más de la mitad de ha condenado y rechazado la alianza: de hecho son más que tienen más desprestigio entre la población.
El desprestigio de la vieja política los ha llevado a presionar a nivel nacional en las entidades, como lo hemos visto en Nuevo León, donde ha habido amenazas, presiones y resistencias por parte de su Congreso local para otorgarle a su Gobernador una licencia para contender por la presidencia, incluso hasta la designación ilegal de un Gobernador interino. Las razones que hay detrás de todo esto es el miedo de que Samuel afecte a su candidata ¿Realmente el elevarle el costo a su candidata avala una toma de protesta para asaltar un gobierno que no ganaron en las urnas?
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Pero fuese Samuel u otra persona da lo mismo: el problema de la vieja y desacreditada política ha estado en ellos, en sus estrategias fallidas y sus malos gobiernos. Su mal prestigio es lo que ahora los orilla a comportarse de la misma estatura política que Morena: un gobierno que en todos los rubros ha resultado un verdadero retroceso para México.
Movimiento Ciudadano es el único que ha estado verdaderamente comprometido con la participación activa de la ciudadanía, la voluntad de cambiar sistemas obsoletos y un compromiso continuo con la construcción de una democracia que es afectada tanto por la vieja política como por la transformación de cuarta. México tiene futuro y para ello basta dar un vistazo a quienes sí han mantenido su visión y quienes sí se han esforzado por construir una alternativa real ante las arbitrariedades de quienes han ostentado y ostenta el poder.