Probablemente amable lector haya escuchado que el cuento más corto en la literatura dice: “Cuando despertó, el dinosaurio seguía allí”, obra del ilustre guatemalteco Augusto Monterroso. Pues esto mismo puede aplicarse a la calamidad de las grandes ciudades que son los baches.
Usted se irá a dormir y cuando despierte el bache frente a su casa continuará ahí inamovible, pero eso sí más grande. Y las autoridades capitalinas juran y perjuran que ya están abatiendo el número de hoyos en vialidades primarias y secundarias.
Es más, afirman que para ubicar a los 200 mil baches en las 217 vías primarias de la capital, la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) utilizó un sistema de información geográfica a través de una aplicación en teléfonos inteligentes.
Con esa herramienta digital, los equipos salen a las calles y hacen la georreferenciación de dónde se encuentra el bache y una vez hecho esto, ya se pueden identificar en la plataforma que ubica todos los puntos donde se localizan los baches.
Dicen los encargados de esta actividad que incluso el levantamiento de los datos arrancó desde antes del principio de la administración y fue un trabajo de varios meses.
El titular de la Secretaría de Obras y Servicios de la Ciudad de México, Raúl Basulto, indicó que este método ya lo habían probado en la alcaldía Iztapalapa y que se adaptó para toda la ciudad.
Añadió el funcionario que a través del programa Megabachetón, ya se han reparado más de 21 mil baches en la capital y la meta es concluir antes de que inicie la temporada de lluvias.
Regularmente Sobse atiende las vialidades con más baches, o en donde existan reportes vecinales o peticiones recolectadas durante el programa Casa por Casa.
Explica el encargado de esta institución que las vialidades por donde circula el transporte de carga, como Calzada Ignacio Zaragoza, Anillo Periférico, Circuito Interior o las vialidades de la zona industrial de Vallejo son las que presentan más baches porque el peso de las unidades genera que la carpeta asfáltica se dañe y ante la presencia de agua en época de lluvias pues un bache se genera de forma rápida.
Y aclara el funcionario del gobierno capitalino que para este programa es fundamental contar son un suministro importante de asfalto. En este sentido, informa que se tiene garantizado el suministro de cuatro mil 300 toneladas de asfalto diarias que se producen en la Planta de Asfalto de la Ciudad de México.
Esta planta ofrece la tonelada de asfalto aproximadamente 40 por ciento más barata que el precio en el mercado. En cuanto al número de trabajadores dedicados al programa Megabachetón está constituido por cincuenta cuadrillas trabajando diariamente en la ciudad, que suman más de mil 500 trabajadores y la meta es llegar a cinco mil trabajadores.
¿Cómo la ve amable lector? ¿Le creemos a la autoridad capitalina? Porque tal vez ese bache que ha visto frente a su casa por meses sea un fantasma que en realidad no existe, o bien que por ser fantasma, no puede ser “georreferenciado” por la tecnología.
Como sea, los baches son una calamidad de las grandes ciudades que seguiremos padeciendo, mientras no exista la voluntad suficiente de las autoridades locales para realizar con eficiencia su trabajo y dejar de politizar acciones que de suyo son rutinarias.
Hasta la próxima.