Muchos de aquellos que salieron a votar el pasado 1 de junio en la elección judicial lo hicieron por consigna. Quienes tuvieron que leer un acordeón como guía para ejercer su voto, no hicieron otra cosa más que avalar un fraude a la democracia.
El retroceso que vivimos en la pasada elección no tiene precedentes, nunca vimos algo así ante la actual autoridad electoral. La elección al poder judicial estuvo más cerca de una elección en la época del PRI, cuando la Secretaría de Gobernación organizaba los comicios, que de una elección democrática.
Lastima ver a aquellos votantes que otorgaron el sufragio a quienes, sin conocer, sabían que eran impulsados por terceros, con intereses distintos a los de llevar justicia imparcial.
Avalar la trampa electoral es asumir que, a pesar de todo lo indeseable que les puede representar, están a favor de corromper sus ideales bajo la idea de una supuesta buena causa.
Porque hacer trampa en esta elección no es otra cosa que darle la razón al viejo PRI, al que corrompía a la gente, el que llenaba urnas, el que marcaba boletas. Y la falacia es el argumento de que es por el bien de “nuestro movimiento”.
Así fue, como el pasado 1 de junio, miles de seguidores de Morena estuvieron dispuestos a ser parte de la trampa, del fraude que representó la elección judicial.
Muchos de ellos por consigna, otros con conciencia, incluso, sabiendo que más de uno de los que llegaron son personas con las que ni comulgan, porque no las conocen, porque representan otros intereses.
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Aquellos quienes de manera consciente aún creen que hacer fraude es por el bien de su movimiento. Avalar la trampa, avalar a Miguel Ángel Yunes como nuevo flamante miembro de Morena, avalar los acordeones, todo bajo el argumento de que es por un mejor país. Caray, qué difícil ser morenista con conciencia en esta época, si es que los hay.
Últimas palabras
El nuevo estadio de fútbol Nicolás Álvarez Ortega (NAO) en Nayarit será un hecho. El gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero aseguró que con esto, el estado recuperará no solo un espacio para el deporte, sino también se respetará y fortalecerá el espacio de la Escuela Estatal de Música. Que así sea, pues varios colectivos culturales han protestado por la construcción.