Alessandra Rojo de la Vega, alcaldesa de Cuauhtémoc, ya tiene tía protectora en Madrid y es la mera presidenta conservadora Isabel Díaz Ayuso. Y es que la líder de los tabernarios apunta a que la izquierda española anda de malas porque “hay demasiados mexicanos en Madrid”. Y justo cuando Alessandra Rojo de la Vega pisa la capital, Isabel Díaz Ayuso sale a soltar flores y a repartir indirectas.
“Afortunadamente, en México hay políticas como Alessandra que entregan su vida por mejorar la de los demás. Que soportan lo impensable porque los totalitarios quieren apartarlas. Nos suena tanto…”, lanzó la presidenta madrileña, mientras dejaba caer que en Madrid los mexicanos “no son ni inmigrantes ni turistas, este es su hogar”.
¿Mensaje para quién? Porque lo de “los totalitarios quieren apartarlas” resuena fuerte, y más cuando sueltan que “las democracias liberales debemos apoyarnos como nunca”. Ayuso subió el tono y defendió a Rojo de la Vega mientras Madrid se convierte en el refugio chic de políticos y empresarios mexicanos.
Enrique Peña Nieto rompió su silencio. Desde su refugio madrileño, el expresidente decidió salir a defenderse de las acusaciones de que habría recibido 25 millones de dólares en sobornos para autorizar la venta del spyware Pegasus en México.
El escándalo explotó tras un reportaje israelí que asegura que los empresarios israelíes Uri Emmanuel Ansbacher y Avishay Samuel Neriya soltaron el maletín con millones para que México comprara el sistema de espionaje que tanto dio de qué hablar durante su sexenio. Hasta Sheinbaum dijo que esto estuvo medio tremendo.