Desde este septiembre y hasta principios de noviembre, los cruceros de Disney se transforman en escenarios mágicos y tenebrosos con la llegada de Halloween on the High Seas, una experiencia que combina la magia de Disney con el encanto del otoño y el espíritu de la Noche de Brujas.
El primero en zarpar fue el Disney Dream, desde Fort Lauderdale, con escalas en dos paraísos de las Bahamas: Castaway Cay y Lookout Cay at Lighthouse Point, islas privadas de Disney donde la aventura continúa entre playas cristalinas y actividades familiares.
La propuesta es clara: llevar Halloween a otro nivel. Desde decoraciones temáticas hasta espectáculos originales, la experiencia está disponible en la mayoría de los cruceros que navegan en estas fechas.
¿Qué podrás encontrar?
Entre las atracciones principales está el mágico árbol de Halloween, que se convierte en el corazón de la celebración a bordo.
Los visitantes disfrutan de espectáculos únicos, actividades para todas las edades y la posibilidad de convivir con personajes de Disney disfrazados para la ocasión.
Especialmente, el viajero puede darse a la tarea de buscar a los personajes de Disney ocultos bajo disfraces fantasmales, como Minnie Mouse, Daisy y Clarabelle que lucen como las icónicas hermanas Sanderson, de la película Hocus Pocus.
Uno de los grandes atractivos es que Disney Cruise Line está diseñado para todas las edades.
Los más pequeños disfrutan en el Oceaneer Club, mientras que adolescentes tienen espacios pensados especialmente para ellos en Vibe y Edge.
Además, los padres cuentan con servicio de guardería para niños desde los seis meses, lo que hace que toda la familia pueda relajarse y disfrutar.
En cuanto al entretenimiento, esta temporada destacan los espectáculos estilo Broadway The Golden Mickeys, La Bella y la Bestia y Disney’s Believe, que conquistan tanto a grandes como a chicos.
Gastronomía especial
La experiencia se complementa con propuestas culinarias que elevan la travesía a un nivel gourmet.
Entre ellas, el restaurante Palo, con cocina italiana y un inolvidable suflé de chocolate, y Remy, de inspiración francesa, que ofrece una experiencia elegante y sofisticada.
Este romántico restaurante inspirado en la película Ratatouille ofrece impresionantes vistas del océano de piso a techo.
Aquí, el chef Arnaud Lallement, galardonado con 3 estrellas Michellin, presenta un impecable menú francés que celebra el mar, la tierra y el mercado mundial.
Desembarcos inolvidables
En estos viajes de tres o cuatro noches, los pasajeros tienen la oportunidad de desembarcar en Lookout Cay at Lighthouse Point, un vibrante refugio isleño nombrado en honor a un histórico faro con espectaculares vistas al océano.
Este destino ofrece una ventana única a la cultura, las tradiciones y las historias de las Bahamas, todo envuelto en la inconfundible magia de Disney.
Allí, los personajes más queridos de la marca también se sumergen en la esencia bahameña, participando en una gran celebración llamada Rush! A Junkanoo Celebration, muy cerca de la playa, donde jóvenes y adultos disfrutan de música, color y actividades acuáticas.
En Castaway Cay, la primera isla privada de Disney, los cruceristas encuentran aún más aventuras: desde lanzarse en toboganes de agua, remar en kayak o practicar snorkel en la laguna azul, hasta recorrer en bicicleta un sendero de 5 kilómetros frente al mar.
Los más pequeños pueden divertirse en el In Da Shade Game Pavilion, un espacio con juegos supervisados diseñados especialmente para ellos.
La experiencia se completa con espectáculos únicos y celebraciones temáticas que recorren cada rincón del viaje.
Desde la fiesta pirata, considerada una de las más épicas en altamar, hasta la inolvidable noche de fuegos artificiales sobre el mar, la magia de Disney está presente todo el tiempo y en todo lugar.