En un encuentro celebrado en la Embajada de Argentina en México, una delegación del Instituto Nacional de Promoción Turística (INPROTUR) presentó las novedades del país bajo la campaña “Freedom”, una invitación a experimentar la libertad a través de la diversidad de paisajes, culturas y sabores que definen a la nación sudamericana.

“Argentina es valiosa por su diversidad natural y cultural. En un mismo territorio se pueden vivir experiencias completamente distintas: desde glaciares y montañas hasta selvas, desiertos, mar y estepas”, explicó Mercedes Blasi, representante de INPROTUR, al destacar la amplitud de su oferta turística.
¿Qué ofrece al turista?
Argentina se organiza en seis grandes regiones turísticas que reflejan su identidad múltiple: el Noroeste con los paisajes multicolores de la Quebrada de Humahuaca y la herencia viva de los pueblos originarios; el Litoral, donde las Cataratas del Iguazú despliegan su poder natural entre selvas y humedales; Córdoba, corazón cultural y universitario del país; la Patagonia, que ofrece lagos, nieve, fauna marina y glaciares; Cuyo, cuna del vino argentino con su icónica Mendoza; y Buenos Aires, una ciudad vibrante que combina historia, arquitectura, gastronomía y vida nocturna con el encanto sereno del campo que la rodea.

En la capital, Buenos Aires, la experiencia va mucho más allá de los clásicos. La llegada de la Guía Michelin ha impulsado su gastronomía local, desde la cocina criolla y las parrillas de renombre hasta propuestas de autor en terrazas y bares speakeasy.

Los cafés notables, escenarios de encuentros entre escritores y políticos, conservan su espíritu porteño intacto. Y a menos de una hora de la ciudad, los visitantes pueden vivir una auténtica fiesta gaucha, con música, asado y hospitalidad campestre.

Más hacia el oeste, Cuyo despliega una de las rutas enoturísticas más completas de Sudamérica. Mendoza, San Juan y San Luis ofrecen vinos reconocidos mundialmente, bodegas abiertas al turismo, experiencias gastronómicas y paisajes que van desde los valles nevados del Aconcagua hasta los escenarios lunares del norte.

En Mendoza, el Bus Vitivinícola permite recorrer varias bodegas en un solo día, mientras que el Valle de Uco se consolida como un imperdible con hoteles boutique y propuestas gastronómicas de nivel internacional.
Con su mezcla de tradición y modernidad, Argentina reafirma su conexión con México como un destino cercano, diverso y vibrante. “Queremos que el viajero mexicano sienta que en Argentina puede encontrar su propia versión de libertad, entre paisajes infinitos, buena mesa y hospitalidad genuina”, concluyó Blasi.

