Cada año, el rugido de los motores hace vibrar a la Ciudad de México. Miles de fanáticos —mexicanos y extranjeros— se dan cita para vivir el Gran Premio de la Ciudad de México, uno de los eventos más esperados del calendario de la Fórmula 1 y, sin duda, una de las fiestas deportivas más grandes del país.
Durante este fin de semana, la capital se convierte en el epicentro del automovilismo mundial con tres días llenos de adrenalina, música, cultura, gastronomía y momentos únicos que hacen que vivir la F1 en México sea una experiencia inolvidable.
Aquí te contamos todo lo que podrás disfrutar dentro y fuera de la pista para unirte a esta celebración que mueve a toda la ciudad:
1. La emoción vive en el Autódromo
El Autódromo Hermanos Rodríguez es el corazón de la F1 en México. Desde las prácticas hasta la carrera principal, cada curva, rugido y bandera agitada se siente con una intensidad única.
Así las Fan Zones estarán encendidas todo el fin de semana, ofreciendo experiencias inmersivas, zonas de descanso con sombra, música en vivo, simuladores de carreras y puntos para tomarte las mejores fotos del evento.
Y si buscas un respiro entre tanto ruido y emoción, los Beer Gardens de Heineken serán el lugar ideal.
Ahí podrás disfrutar actividades interactivas, buena música y una cerveza 100% pura malta, perfecta para acompañar la adrenalina del momento.
2. Jungle encenderá la ciudad
La velocidad se mezcla con el ritmo, porque la F1 también suena. Este año, el esperado Afterwork Vol. 5 sube el volumen con Jungle, el dúo británico que conquista el mundo con su fusión de soul y funk.
Será una noche privada en la que la música, el diseño y la energía de los fans se unirán en un ambiente exclusivo, marcando el arranque de un fin de semana lleno de estilo y celebración.
3. Así podrás estar en el pódium
El momento cumbre del fin de semana llega con la ceremonia del pódium. Mientras los pilotos celebran, los fans también serán parte de la historia.
Gracias a la dinámica de My Heineken, quienes se registraron y subieron su foto podrán ver su imagen proyectada en el aire durante la premiación, junto con cientos de instantáneas de otros apasionados del automovilismo.
Una auténtica lluvia de confeti que une a los campeones de la pista con los de las gradas.
4. Cuando la bandera cae...
Una vez que cae la bandera a cuadros, la emoción no termina, ya que la CDMX se convierte en una gran pista de fiesta. Los bares, rooftops y antros de moda abren sus puertas para recibir a fanáticos, influencers, celebridades y, a veces, incluso a los pilotos que deciden prolongar la celebración.
Desde Polanco y Roma Norte hasta el corazón de Reforma, la ciudad vibra con afters, música en vivo, luces de neón y esa energía única que solo el Gran Premio puede traer.
5. Todo con responsabilidad
Y si no tomas alcohol y deseas disfrutar de la F1 con responsabilidad, Heineken 0.0 acompañará las actividades de esta fiesta todo el fin de semana con su inconfundible sabor y cero alcohol, para que goces cada momento sin perder el control.