Educación

El inglés como camino inclusivo: la nueva propuesta para infancias neurodivergentes

Los nuevos libros de Mario Herrera, publicados por Pearson, ofrecen un enfoque empático y multisensorial para acompañar a niños neurodivergentes en el aprendizaje del inglés

Pearson Languages
El libro integra el aprendizaje socioemocional (SEL) como eje transversal. (Freepik)

En los primeros años de vida, el aprendizaje ocurre a través de pequeñas chispas: una curiosidad que se enciende, un sonido nuevo que despierta una sonrisa, una palabra que abre un mundo. Para muchas infancias neurodivergentes —niños que procesan, sienten y exploran de maneras únicas— aprender otro idioma no es solo una habilidad escolar; es una herramienta para estructurar ideas, dar forma a emociones y conectar con los demás desde su propio ritmo.

Pearson Languages
Small Big Things está dirigido a niños de 6 a 11 años. (Freepik)

En ese contexto surge el trabajo más reciente del autor Mario Herrera, quien junto con Pearson acaba de publicar Tiny Big Things y Small Big Things, dos programas diseñados para acompañar a niños neurodivergentes en el aprendizaje del inglés desde una mirada más empática, flexible y sensorial. Son materiales que entienden algo esencial: ninguna mente aprende igual, y justamente ahí radica la riqueza de la neurodiversidad.

El bilingüismo como aliado del desarrollo

La ciencia lo ha demostrado: aprender un segundo idioma durante la infancia fortalece la plasticidad neuronal, mejora la memoria de trabajo y potencia la comunicación. En niños neurodivergentes —como aquellos dentro del espectro autista, con TDAH o dislexia— estos beneficios pueden traducirse en más herramientas para organizar pensamientos, expandir el lenguaje y reforzar la confianza.

Pero también implica un reto: cada niño necesita estrategias distintas. Las metodologías multisensoriales, las actividades prácticas, la repetición segura y los entornos predecibles son clave para que el inglés no se sienta como presión, sino como un espacio amable donde pueden explorar.


Pearson Languages
Cuando se enseña con empatía, estructura y evaluación justa, el bilingüismo fortalece las habilidades cognitivas y emocionales de cada niño. (Freepik)

Tecnología que acompaña, no reemplaza

Un estudio de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco destaca cómo la tecnología se ha vuelto un aliado para crear espacios inclusivos: permite que cada estudiante avance a su ritmo, reduce la ansiedad y brinda experiencias personalizadas. En el aprendizaje de un idioma —donde las expectativas suelen generar tensión— esto marca una gran diferencia: el aula se vuelve más flexible, más humana.

Tiny Big Things: un universo que respeta los ritmos

Pensado para los más pequeños, Tiny Big Things se construye sobre tres pilares que responden directamente a las necesidades de la educación inclusiva:

• Indagación y proyectos. Actividades que abren la puerta a la exploración libre, permitiendo que cada niño siga sus intereses y se mueva desde su curiosidad.

• Currículo inclusivo orientado al bienestar. Un enfoque que reconoce diferentes estilos de aprendizaje y que prioriza la autorregulación emocional para construir un ambiente seguro.

• Enfoque comunicativo. El inglés se trabaja como una herramienta de expresión y colaboración, reforzando la conexión social y la confianza.

Pearson Languages
La neurodiversidad es una fortaleza, y el aprendizaje del inglés puede ser una vía para potenciarla. (Freepik)

Además, integra aprendizaje socioemocional (SEL), el Oracy Framework y herramientas de inteligencia artificial que acompañan el desarrollo de habilidades comunicativas en contextos reales.

Small Big Things: estructura, tecnología y crecimiento emocional

Dirigido a niños de 6 a 11 años, Small Big Things combina recursos tradicionales con herramientas digitales e IA: un tutor conversacional, evaluaciones personalizadas y seguimiento del progreso mediante GSEmapped. Todo esto se entrelaza con rutinas de pensamiento visible y actividades que refuerzan el bienestar emocional, ayudando a los estudiantes a comunicar ideas con mayor claridad y confianza.

Una mirada más humana hacia el aprendizaje

Enseñar inglés —o cualquier idioma— a niños neurodivergentes requiere empatía, estructura y una evaluación justa. Pero, sobre todo, requiere recordar que cada infancia tiene su propio ritmo para aprender, expresar y entender el mundo.

La propuesta de Mario Herrera apunta justamente a eso: a construir una educación donde el bilingüismo no sea un estándar rígido, sino un puente que respeta diferencias y celebra lo que cada mente puede crear.

Tiny Big Things y Small Big Things son, en esencia, una invitación a transformar la enseñanza desde la sensibilidad. Un recordatorio de que cuando acompañamos con cuidado, cada niño —divergente o no— tiene la oportunidad de brillar.

       

Tags

     

Lo Último