Son vacaciones de verano, Rogelio de ocho años pasa los días calurosos en el pueblo de su niñera Eduarda (Teresa Sánchez), en lo profundo de la selva de Yucatán, pero un pensamiento invade su mente: ¿qué pasa cuando morimos?
En sus sueños, Rogelio ve a un hombre viejo que va dejando un rastro de muerte al pasar: el Monstruo de Xibalba. Esta película llega a cines el 4 de diciembre.

Monstruo de Xibalba, ópera prima de Manuela Irene, es un relato sobre la infancia que aborda temas profundos como la pérdida y la muerte. La película evoca esta etapa temprana de la vida no como un tiempo idílico, sino como un despertar a un mundo complejo en el que el niño se debe conciliar con hechos tan fuertes como la falta de amor o la certeza de la muerte.
Naturalmente los niños preguntan ¿para qué estamos? ¿Por qué existe el universo?, los adultos no tenemos respuesta. Reflexiona la directora.
La película cuenta con el rol protagónico del pequeño Rogelio Ojeda, actor natural, sobre quien recae la historia y que interpreta a un niño con mucha curiosidad y valentía que se da a la tarea de investigar eso que ocupa su mente, ¿qué pasa cuando mueres?

Comienza una aventura junto a dos personajes que se convierten en su pandilla, Juanito (Gibrán Alonzo) y Lucio ( Leonel Pat Yeh), los tres se adentran en la selva yucateca para rapear en maya y espiar al monstruo.
Xibalba es el nombre de la mitología maya para el inframundo. Acorde al Popol Vuh, la entrada al mundo de los muertos está en cuevas, cenotes y en las profundidades del mar. Cuando Rogelio aprende esto, comienza a desarrollar teorías propias.

Monstruo de Xibalba es una película entrañable que explora la infancia y el complejo proceso de crecer y enfrentarse a lo único definitivo en la vida: la muerte.
La película será distribuida por Mandarina Cine, gracias al apoyo de EFICINE, y podrá verse en diversas salas del país.

