Un par de enfrentamientos entre grupos armados dejaron el viernes un número indeterminado de muertos y heridos en la ciudad mexicana de Matamoros --fronteriza con Brownsville, Texas-- y las autoridades pidieron a la población permanecer en sus casas mientras las fuerzas del orden patrullaban las calles.
La Secretaría de Seguridad Pública del estado de Tamaulipas, donde se encuentra Matamoros, en el extremo noreste de México, descartó de inmediato que militares o policías hubieran participado en los tiroteos, después de que efectivos mataran a balazos hace días a cinco jóvenes en un controvertido incidente en la ciudad de Nuevo Laredo, fronteriza con Laredo, Texas.
“Se han suscitado dos incidentes armados entre personas civiles no identificadas, lamentando pérdidas de vidas humanas y lesionados. Se está corroborando la exactitud de las bajas”, dijo la SSP local a través de sus cuentas en redes sociales.
“Se recomienda a la población en general, mantenerse en casa para no exponer su integridad”, señaló. También pidió que los padres no enviaran a los niños a la escuela en los turnos vespertinos. La SSP se abstuvo de indicar si los protagonistas de los enfrentamientos pertenecían a grupos delictivos y sólo se refirió ellos como “civiles”.
El consulado de Estados Unidos en la ciudad lanzó un mensaje de alerta a sus ciudadanos tras el reporte de balaceras.
En las redes sociales se publicaron videos de la situación en la ciudad, en uno de los cuales podía verse cómo hombres armados arrastran dos cadáveres hasta una camioneta a pleno día y rodeados de vehículos, unos que esperan para poder seguir su camino y otros que se dan la vuelta.
Tamaulipas, fronterizo con Texas, registra una fuerte ola de violencia vinculada al crimen organizado y es habitual que grupos rivales se lleven a sus muertos tras los enfrentamientos.
Los dos principales cárteles de la región son el del Golfo, que tiene su feudo en Matamoros, y el Cártel del Golfo (escisión de los antiguos Zetas) en Nuevo Laredo, 330 kilómetros más al oeste. Pero además hay muchas células de cada uno de estos grupos que luchan entre sí.
Según la Secretaría de Seguridad, tanto el Ejército como la Marina, la Guardia Nacional, la fiscalía federal y la policía estatal incrementaron “su presencia mediante recorridos por toda el área urbana y sus inmediaciones para proteger a la ciudadanía”.
El fin de semana pasado, cinco jóvenes fueron abatidos por el ejército en Nuevo Laredo, en un suceso todavía sin aclarar que organizaciones de derechos humanos consideraron un uso excesivo de la fuerza letal. La fiscalía federal investiga el asunto.