Algunos municipios de la zona metropolitana de Puebla no han atendido el déficit de policías ni han incrementado los salarios de sus elementos, señaló el secretario de Gobernación, Javier Aquino Limón.
Destacó que la sociedad exige resultados y la obligación de los alcaldes, tanto en funciones como entrantes, es implementar acciones que garanticen la seguridad.
El encargado de la gobernanza en el estado, compartió con Publimetro algunos de los retos y deficiencias detectados en varios municipios, donde la falta de acciones para reforzar la seguridad y mejorar las condiciones de los elementos policiales ha sido evidente.
–¿Qué medidas se están implementando para que Puebla no baje la guardia en temas de seguridad?
El tema de seguridad es un pilar para este gobierno, y no es una cuestión temporal; ha sido una prioridad constante. Hemos solicitado a los municipios, en repetidas ocasiones, que mantengan la presencia que deben tener. La seguridad involucra a los ayuntamientos, el gobierno estatal y el federal.
El hecho de que tengamos mesas de seguridad diarias, que visitemos las regiones del estado para hacer reuniones específicas con los presidentes municipales, tanto en funciones como electos, y que se mantenga una capacitación constante de los cuerpos policiales, son elementos clave.
–¿Cómo se trabaja con los municipios para fortalecer la seguridad en las zonas más afectadas?
Hacemos una sugerencia respetuosa, pero muy firme, porque es evidente cuando un municipio se ha relajado: en el número de policías, en la certificación de los existentes, en los salarios que reciben. Es notorio cuando un municipio descuida estos aspectos.
Cuando detectamos un foco rojo, invitamos al presidente municipal en funciones, dentro de su autonomía, a que tome las medidas necesarias. Dejamos claro que habrá consecuencias con la sociedad y con su propia comunidad si no actúan.
En varios municipios del área metropolitana ha habido sorpresas, ya que debería haber más presencia policial y no la hay. Más allá de la afiliación política, tenemos que actuar con responsabilidad en esta y la próxima administración.
–¿En qué municipios han encontrado deficiencias en las acciones de seguridad?
Por el número de habitantes, en la zona metropolitana debería haber una mayor presencia policial. El gobierno federal establece un estándar mínimo de 1.8 policías por cada mil habitantes, y en algunos municipios, como Amozoc, Coronango y Cuautlancingo, hay una disparidad notable.
Pero más allá de los números, es crucial cómo enfrentan los problemas. Por ejemplo, en San Andrés Cholula se descubrió un narcolaboratorio, y es preocupante que la policía municipal no hubiera informado sobre este asunto, considerando su importancia.
No se trata de hacer acusaciones sin fundamento, sino de realizar un análisis profundo que exija compromiso de los gobernantes en turno. La sociedad quiere resultados.
–¿Cómo se coordinan las autoridades ante la amenaza del crimen organizado?
La presencia de grupos delictivos organizados es un tema que se atiende constantemente, no se ha descuidado. Por eso tenemos la presencia de la Guardia Nacional (GN), incluso la Secretaría de Marina está haciendo una coadyuvancia con el estado en cuanto se requiere.
El reto también está en que las fiscalías estatal y federal coordinen los mecanismos necesarios e involucren a todas las partes para acceder a la justicia. Es esencial que se fortalezcan las estrategias conjuntas.
