Siete de cada 10 corralones en el estado de Puebla han funcionando como “centros de saqueo” en perjuicio de transportistas y automovilistas, por lo que serán clasurados, advirtió el gobernador Alejandro Armenta Mier.
Durante la puesta en marcha del programa Operativo Paradero Seguro, el mandatario informó que ya se realizó un diagnóstico completo de estos espacios, tras una instrucción que giró hace un mes a las secretarías de Movilidad, Gobernación y Seguridad Pública, con el objetivo de frenar abusos.
“Ya tengo el diagnóstico de todos los corralones. El 70% no están regulados. Vamos a clausurar los que se han convertido en centros de saqueo, para que quien sufre un robo no tenga que sufrir también por el arrastre y por el cobro en el corralón”, afirmó Armenta.
Supervisión y nuevas tarifas
El gobernador anunció que se establecerán nuevas tarifas en la Ley de Ingresos, con el objetivo de que el costo por arrastre y resguardo de vehículos sea mínimo. Además, habrá supervisión permanente en estos establecimientos para evitar actos de corrupción o cobros indebidos.
Armenta también lanzó un llamado a los funcionarios de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMT) a actuar con responsabilidad y cero tolerancia a la corrupción.
“Si ustedes conocen a un funcionario que cobre un moche o una ‘milpa’ para agilizar trámites o liberar un vehículo, denúncienlo. Será despedido de inmediato”, aseguró.
Un problema que afecta al sector empresarial
El gobernador señaló que esta acción responde a un reclamo del sector empresarial, que ha expuesto en mesas de seguridad el impacto del robo en carreteras. No solo por el hurto de mercancía, sino por el calvario posterior que enfrentan transportistas y ciudadanos al recuperar sus unidades.
“Hay casos donde el costo del arrastre y del corralón es mayor que lo robado, o incluso más alto que el valor del propio vehículo”, dijo.