La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado confirmó la demolición de 26 bodegas construidas de forma irregular sobre ductos de Petróleos Mexicanos (PEMEX) en la zona de la Central de Abasto de Puebla.
La medida, realizada en coordinación con el Ayuntamiento capitalino, busca eliminar riesgos derivados de su ubicación y prevenir actividades delictivas relacionadas con el robo de combustible.
El titular de la SSP, vicealmirante Francisco Sánchez González, explicó que estas estructuras representaban un peligro inminente para la ciudadanía, ya que fueron edificadas sin permisos entre 2018 y 2021, en la franja de seguridad de PEMEX. “Se han convertido en nidos de delincuentes”, afirmó.
Estas acciones formaron parte de un operativo conjunto entre la Secretaría de Gobernación municipal, la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), según confirmaron las autoridades.
Desde el inicio de su administración, el gobernador Alejandro Armenta advirtió que dichas bodegas habían sido levantadas por supuestos empresarios que, en realidad, operaban como fachada de grupos dedicados al huachicoleo. De acuerdo con el mandatario, su objetivo era facilitar la extracción ilegal de combustible directamente de los ductos.
En junio de 2023, en esa misma zona, autoridades descubrieron un túnel con ventilación e iluminación que conectaba con una toma clandestina de gas, justo debajo de una taquería dentro del tianguis Piedad Nacozari, también en la Central de Abasto. Este “huachitúnel” fue utilizado para la extracción ilegal de hidrocarburos.
El vicealmirante Sánchez detalló que el tema fue abordado en una reunión con autoridades municipales, entre ellos el coronel Félix Pallares y el director de Gobierno del Ayuntamiento, quienes coincidieron en la urgencia de la demolición por el alto riesgo que representa la zona.
Por su parte, el presidente municipal de Puebla, José Chedraui Budib, informó que ya se investiga la legalidad de los predios, la emisión de permisos y en qué trienio fueron autorizadas las construcciones. “La Central de Abasto tiene que ser el centro más importante de Puebla”, subrayó.
Además, indicó que se trabaja en conjunto con el Consejo de la Central para reforzar la seguridad con accesos controlados, cámaras de videovigilancia y cercado perimetral. No obstante, algunos locatarios han mostrado resistencia a la instalación de bardas, por lo que este punto sigue en análisis.
Cabe recordar que en 2022 un fallo ordenó la demolición de las bodegas, y una segunda resolución en 2024 reafirmó la medida. Ninguna fue acatada por la administración municipal anterior.