El Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI) nombró a Juan José Castro Justo como nuevo delegado estatal en Puebla, con la encomienda de encabezar el proceso de renovación de la dirigencia del partido en la entidad.
La designación se oficializó durante una reunión con secretarios, sectores y líderes del tricolor, en la que Jorge Armando Meade Ocaranza, secretario de Organización del CEN, acudió en representación del dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, para ratificar el nombramiento.
Castro Justo cuenta con una amplia trayectoria política: ha sido tres veces diputado federal, senador de la República, secretario de Estado en Guerrero y delegado general del PRI en procesos electorales de Veracruz.
Renovación interna en Puebla
Con esta decisión, el PRI busca cubrir el vacío que dejó Néstor Camarillo Medina, quien el pasado 25 de agosto renunció a la militancia y a la presidencia estatal para sumarse a la bancada de Movimiento Ciudadano (MC) en el Senado.
Su salida fue calificada por algunos priistas como una traición a la estructura que lo impulsó políticamente, luego de que bajo su liderazgo el partido sufriera una de sus peores derrotas en las elecciones de 2024.
En el Comité Directivo Estatal (CDE) se mantiene Delfina Pozos Vergara como secretaria general. Ella ya había manifestado en julio su intención de competir por la dirigencia, proceso que se renovará formalmente en septiembre.
Reconstrucción partidista
Durante su presentación, Juan José Castro reconoció el reto que enfrenta el tricolor en Puebla y llamó a la militancia a cerrar filas para emprender un proceso de reorganización interna y recuperación de espacios políticos rumbo al 2027.
“Finalmente, cada quien en lo personal decide su trayectoria y militancia. La sociedad habrá de juzgar en su justa dimensión lo que sucedió en este caso”, señaló el dirigente provisional en referencia a la salida de Camarillo.
Con su llegada, el PRI busca iniciar una etapa de reconstrucción que le permita recuperar presencia en el escenario político poblano, tras años de debilitamiento y fracturas internas.