Querétaro se ubica en el top 3 de las entidades con mayor prevalencia de discriminación en la población de 18 años y más con 30.5%, de acuerdo con los datos publicados en la Encuesta Nacional Sobre Discriminación 2022 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La media nacional de prevalencia es del 23.7%; es decir, que la entidad se encuentra 6.8 puntos por encima del promedio. Esta cifra tuvo un incremento de 57% en comparación con el año 2017, cuando solo el 19.4% de la población encuestaba manifestó haber sido víctima de algún tipo de discriminación en Querétaro.
Los datos publicados por el Inegi corresponden a una encuesta levantada durante el período del 18 de julio al 9 de septiembre de 2022. Se toman aspectos como el tono de piel, manera de hablar, peso o estatura, forma de vestir o arreglo personal, clase social, lugar de residencia, creencias religiosas, sexo, edad, orientación sexual, ser una persona indígena o afrodescendiente, tener alguna discapacidad, tener alguna enfermedad, opiniones políticas, estado civil o situación de pareja o familiar, entre otros.
Yucatán y Puebla son las dos entidades que ocupan el primer lugar en la encuesta, con 32.1% y 30.6%. Mientras que las entidades donde la percepción de discriminación es menor son: Sinaloa, con 13.8 %, seguida de Sonora, con 17.5 % y Nayarit, con 17.9 %.
A nivel nacional las cifras crecieron del 20.2% hasta el 23.7%, y que en la división por sexo, el 24.5% de las mujeres dijo haber sufrido discriminación, que en su mayoría lo atribuyó a ser mujer, seguido de la forma de vestir, así como peso o estatura.
En esta categoría, Querétaro reflejó que el 31.7% de mujeres de 18 años y más que declararon haber sido discriminadas en los últimos 12 meses, cuando la media nacional fue de 24.5%. También la cifra de hombres que sufrió discriminación en México incrementó desde 2017, de acuerdo a la última encuesta, pasando del 20.2% al 22.8%. El grupo de la diversidad sexual y de género es el grupo más discriminado, que registró una prevalencia del 37.3%, seguido de afrodescendientes en el 35.6%, con el 34.6% las trabajadoras del hogar, y con 33.8% las personas con discapacidad.