Este fin de semana entró en vigor la nueva Ley para la Regulación de Asentamientos Humanos Irregulares, Predios Urbanos, Rústicos y Sociales del Estado de Querétaro, con la que se buscará agilizar los trámites para poner en regla a las comunidades asentadas de forma irregular.
La nueva ley, propuesta el 4 de julio pasado por el diputado presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano, Obras Públicas y Comunicaciones, Germaín Garfias, tiene casi el mismo contenido que la ley que operó de 2016 a 2022, con la salvedad de que se eliminó el capítulo octavo sobre los predios familiares.
La ley tendrá una duración de cuatro años, y estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2027. El documento señala que el incremento de la migración hacia el estado, aunada a la falta de oportunidades económicas, genera que muchas familias opten por establecerse en asentamientos humanos irregulares.
Explica que esa incertidumbre jurídica impide que las autoridades brinden los servicios básicos necesarios para garantizar una vida digna y saludable, lo que genera problemas sociales de segregación y desigualdad. Por ello, señala la ley temporal, se buscará que los asentamientos irregulares sean planeados, regulados y gestionados con los principios de inclusión, equidad y accesibilidad.
“Se hace elemental que se cuente en la entidad con los mecanismos legales que establezcan la coordinación entre las autoridades locales para que se atienda la problemática que generan los asentamientos humanos irregulares y se garantice a las personas que los habitan el derecho de contar con una vivienda regularizada a través trámites ágiles, simplificados y a bajo costo”, reza el documento.
La publicación de esta ley llega un mes después de que los asentamientos irregulares fueran señalados como parte de la problemática de arrastre de materiales hacia vialidades como 5 de Febrero y la carretera a Chichimequillas durante temporada de lluvias.
En concreto, se identificó un asentamiento irregular entre Menchaca y San José El Alto, a cuyos habitantes se les solicitó desalojar de urgencia al tratarse de una zona en riesgo de deslave. A día de hoy se desconoce cuántos asentamientos irregulares existen en Querétaro; no obstante, autoridades municipales y estatales realizan actualmente un censo para conocer la situación de estos lugares.