La Secretaría de Desarrollo Social del estado de Querétaro (Sedesoq) lanzó dos programas de vivienda digna, uno para entregar materiales de construcción e insumos de servicios básicos a personas en condición de pobreza y con carencias en la calidad de sus viviendas, con prioridad en el municipio de Cadereyta, y otro para facilitar trámites de regulación a quienes habiten en asentamientos irregulares.
Y es que según el Informe de Pobreza y Evaluación 2020 del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en Querétaro, alrededor de 160 mil personas, que representan alrededor de 6.7% de la población total, tienen carencias de calidad y espacio en su vivienda.
Además, el 10%, que corresponde a unas 239 mil personas, tiene algún tipo de carencia de acceso a servicios públicos. En el caso de Cadereyta de Montes, el 52.2% de su población se encuentra en pobreza, y el 35.6% tiene alguna carencia por acceso a servicios básicos en su vivienda, incluyendo 3 mil 943 viviendas sin acceso a agua.
Ante este escenario, la Sedesoq lanzó dos subprogramas, con el fin de “garantizar el derecho a una vivienda adecuada, así como promover y facilitar la certeza jurídica patrimonial”.
El primero consistirá en la entrega de materiales para que los beneficiarios puedan construir o mejorar sus techos, pisos, cuartos o baños; también podrán recibir tinacos, láminas, paquetes de focos ahorradores, paneles o calentadores solares, ahorradores de agua o equipo para almacenarla, entre otros insumos de servicios básicos.
Con dicho subprograma se espera beneficiar a unas 3 mil 876 personas en todo el estado y 5 mil 500 personas de Cadereyta, específicamente con tinacos.
El segundo subprograma estará destinado a aquellas personas que vivan en asentamientos irregulares. La idea es darles facilidades para obtener escrituras públicas o títulos de propiedad de los lugares donde habitan, para darles certeza jurídica y contribuir al ordenamiento de asentamientos humanos irregulares.
Este beneficio aplicará únicamente a asentamientos con más de 12 años de antigüedad, y otro de sus principales objetivos es ayudar a actualizar del Padrón Único de Asentamientos Humanos Irregulares, para identificar aquellos que pudieran representar un riesgo a la población.