Durante este año, las tierras destinadas para actividades agrícolas en el estado de Querétaro disminuyeron 20.1% debido a la sequía, el crecimiento urbano y los cambios de uso de suelo, de acuerdo con la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Sedea) de la entidad.
Según cifras de la dependencia, en el 2022 Querétaro contaba con 191 mil 84 hectáreas de siembra, de las cuales 72 mil 50 eran de riego y 119 mil 34 de temporal. Sin embargo, a corte de septiembre de este año, la frontera agrícola bajó a 152 mil 606 hectáreas, de las cuales 59 mil 598 son de riego y 93 mil 8 de temporal.
Es decir, en nueve meses el estado perdió 38 mil 478 hectáreas agrícolas como consecuencia de cambios de uso de suelo, crecimiento urbanos o inactividad en las tierras de cultivo.
Actualmente, Querétaro es la tercera entidad con más sequía del país, con el 100% de su territorio afectado. Según el Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) con corte al 31 de octubre, de los 18 municipios queretanos, 5 se encuentran en sequía excepcional, 10 en sequía extrema y 3 en sequía severa.
También, de acuerdo con el reporte de Situación Actual de los Almacenamientos de la Conagua, a corte de septiembre, las 26 presas de la entidad se encontraban en conjunto al 14% de su capacidad, con tres de las cuatro más grandes totalmente vacías. Además, de los 11 mantos acuíferos del estado, ocho presentan déficit por 246 millones de metros cúbicos de agua anuales.
Todas estas condiciones han provocado que la producción de maíz se vea mermada considerablemente, pues de las 42 mil 536 hectáreas de maíz de temporal que se sembraron en 2022, únicamente 22 mil 730, que representan el 53%, estén sembradas actualmente, afectando a más de 25 mil familias productoras.
A ello, señaló la dependencia, se suman el aumento en el costo de los insumos derivado del incremento de los energéticos para fabricar fertilizantes nitrogenados, y los problemas de comercialización debido al requerimiento de adaptar los productos a las necesidades del mercado.
Debido a este escenario, la Sedea lanzó un “Programa institucional emergente para productores agropecuarios afectados por la sequía”, cuyo objetivo será el de apoyar en especie a personas físicas dedicadas a la producción agropecuaria de temporal en el Estado y que sus actividades productivas se hayan visto afectadas por efecto de la sequía.
El programa, cuya inversión será de 60 millones de pesos, beneficiará con maíz para consumo humano y equipo para almacenamiento y distribución de agua a 17 mil personas afectadas por la sequía. Los apoyos irán desde los 150 hasta los 450 kilos de maíz, dependiendo del número de hectáreas que posean los solicitantes.
