Ante los asaltos en restaurantes registrados este fin de semana, los agremiados a la Cámara de Comercio ya refuerzan estrategias en materia de seguridad, e inclusive se plantea la posibilidad de botones de pánico al interior de los comercios.
Los robos suscitados en el Fogón del Camarada, San Cosme Breakfast & Brunch Restaurant y en la taberna El Pijo, generaron preocupación en comercios, principalmente del primer cuadro de la ciudad, refirió Antonio Torres, vicepresidente de la Cámara de Comercio del Centro Histórico.
Por ello, ya se solicitó una reunión con la Secretaría de Seguridad Ciudadana y la secretaría municipal para solicitar que dentro de los negocios se vuelvan a colocar botones de pánico que venían funcionando y que habían quedado obsoletos”, considerando que también no se pueden colocar más al exterior de los que autoriza el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Remarcó que los hechos suscitados ante en el corto plazo y al haber ya armas de fuego, rompieron el esquema de seguridad que se tenía en la entidad, y con el objetivo de prevenir que esto impacte la dinámica comercial que se tienen en este momento se plantearán nuevas estrategias al interior de los comercios y por parte de las autoridades.
Comerciantes como Gustavo Govea, dueño de comercio de comida, destacó que como sector han logrado conformar un grupo de WhatsApp en el que se comunica cualquier anomalía o situación irregular, inclusive para alertar sobre números de teléfono que han realizado llamadas para obligar a algún cobro o extorsión.
Ante lo suscitado el fin de semana, llamó a estar alertas “si ves alguna anomalía, o cualquier situación sospechosa reportarla. Yo creo que tenemos que combatir la inseguridad si nos unimos todos”.
Gema Delgado Muñoz, encargada de una paletería La Michoacana, consideró que estrategias como mayor patrullaje y recorridos podrían ser más efectivas para inhibir los hechos delictivos, ya que zonas que en un horario nocturno se consideran de consideración.
En este mismo sentido, Fabián Camacho, destacó que estos hechos obligan a todo el sector a fortalecer la comunicación y coordinación con las instancias municipales y estatal de seguridad.
“Al ser una temporada de alto consumo, es sumamente relevante que se mantenga este ejercicio de coordinación para estar fortaleciendo las acciones, prevención, de vinculación entre negocios y zonas comerciales con la autoridad y al mismo tiempo la pronta comunicación cuando sucedan este tipo de fenómenos y actuar con prontitud para que se pueda ejercer la justicia”.
Aunque descartó que estos casos en los que se cometieron los delitos no son agremiados a la cámara, se ofreció acompañamiento, al igual que el resto de las unidades de negocio, para lograr que se cierre la temporada con bajos índices delictivos y lo más cercano al saldo blanco.
