La realidad no está ahí para ser creída, sino para ser creada (Leonora Carrington).
Leonora Carrington nació en Lancashire, Inglaterra en 1917, por ende se podría decir que fue una artista inglesa, si embargo ella se definía a si misma como artista mexicana.
Leonora fue una de las artistas más prominentes del movimiento surrealista. Produjo pintura, escultura, grabado, textil, joyería; y escribió dramaturgia, novela, y cuento. Se relacionó con los artistas surrealistas más destacados de su época, entre ellos Max Ernst, Remedios Varo, André Breton y Luis Buñuel.
Carrington produjo obras que mezclan la autobiografía y la ficción, lo cotidiano y lo mágico. Sus obras están pobladas por seres fantásticos, a menudo animales intermediarios que nos refieren a la mitología celta, el hermetismo, la cábala y la literatura fantástica.
Leonora se enamoró de Max Ernst, uno de los artistas más destacados del movimiento surrealista. En época de la segunda guerra mundial, Ernst fue arrestado y Leonora tuvo que salir huyendo a España, donde fue internada en un hospital psiquiátrico en Santander por el fuerte desequilibrio emocional que sufrió tras el arresto de Ernst. Este episodio es importante en la carrera artísticas de Leonora pues en sus delirios logra desarrollar todo este mundo de personajes ficticios que podemosver en su obra.
Carrington llegó a México en 1941, por estas fechas escribió Abajo, texto que recoge sus experiencias en el psiquiátrico de Santander. Convivió con varios surrealistas europeos que se refugiaron en México gracias a las generosas políticas migratorias del presidente Lázaro Cárdenas. Entre ellos estaban Wolfgang Paalen y Alice Rahon, José y Kati Horna, Benjamin Peret y Remedios Varo, quién será su intima amiga.
En México, Carrington desarrolló plenamente su potencial artístico y formó una familia al lado del fotógrafo húngaro Emir ‘Chiki’ Weisz, con quien tuvo dos hijos, Pablo y Gabriel. Con excepción de algunos años en Nueva York y Chicago, Carrington pasó el resto de su vida en México. En los 1970s, Carrington se unió al movimiento feminista en México y produjo el poster ‘Mujeres Conciencia’. En sus últimos años, se dedicó principalmente a la escultura. Murió a los 94 años de edad en 2011.