La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) capacitó a un total de mil 234 funcionarios públicos del estado de Querétaro, en materia de prevención de tortura dentro de separos municipales, con el fin de erradicar el abuso de autoridad.
Durante una ceremonia de entrega simbólica de constancias a los funcionarios, el director general de Educación en Derechos Humanos de la CNDH, Juan Manuel Estrada Juárez, recordó que, tras una supervisión que el organismo aplicó a la entidad a finales de 2023, se reveló que era necesario fortalecer y capacitar a los elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Por ello, reconoció a la administración por extender las capacitaciones a elementos de las policías estatal y municipales, así como a sus secretarios, directores y personal administrativo de los juzgados cívicos municipales, con el fin de sumar a la cultura de paz.
“Ustedes están haciendo lo que les corresponde, capacitarse por el bien de la ciudadanía y creemos que esta unión entre la Comisión Nacional y el Gobierno de Querétaro será fructífera y muy larga”, dijo.
Por su parte, el secretario de Gobierno, Carlos Alcaraz, reconoció al personal capacitado y sostuvo que el ejercicio es una muestra de que la entidad es un “referente de paz y tranquilidad”, en la que se respetan los derechos humanos y el marco jurídico como fuentes principales de actuación.
“Es una entidad en la cual, si no respetamos y actuamos con congruencia para erradicar cualquier manifestación de discriminación y abuso por parte de la autoridad, no podríamos cumplir a la confianza de la ciudadanía y a la construcción real de un estado de derecho e instituciones sólidas”, apuntó.
A su vez, la subsecretaria de Derechos Humanos, Sol Kuri, afirmó que, con las capacitaciones, se dio cumplimiento a las recomendaciones del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, las cuales permitirán avanzar hacia la erradicación de prácticas que lesionen la integridad de las personas.
“Querétaro ha asumido con convicción la tarea de avanzar en una política pública transversal que no tolere la tortura ni los tratos crueles, inhumanos o degradantes, y que comprenda que la seguridad y los derechos humanos no solo pueden convivir, sino que deben fortalecerse mutuamente”, finalizó.