Regidores de Cadereyta acusó violencia política en razón de género por parte de la presidenta municipal, Astrid Ortega. La morenista Juana García Martínez, narró que en una reunión privada hubo acoso, por lo que acudió a presentar una denuncia ante Instituto Electoral de Querétaro en contra de la alcaldesa y otros servidores públicos.
Detalló que personal del municipio acudió a su oficina, en donde atendía a la ciudadanía, ya que al interior de palacio municipal no se cuenta con un espacio idóneo, sin embargo, quienes acudieron comenzaron a grabar este encuentro, a pesar de que se les pidió que se retirarán.
“Yo tengo pruebas, porque es mi oficia. En ese momento me sentí acorralada, acosada, y no se iban, pero para mí es el colmó porque no es posible qu dentro de mi vida privada o profesional estén haciendo este tipo de cosas. Y asumo, a reserva de las investigaciones, que acudieron por mandato de alguien”.
Precisó que se considera violencia política, ya que no se le está permitiendo ejercer su labor como regidora, por ello, solicitó medidas cautelares, pero también teme que se ensañen con las comunidades con las que ha estado trabajando activamente.
Aunque forma parte del partido que gobierna, reconoció que hay aspectos en los que no ha estado de acuerdo, lo que podría ser la causa de estas acciones, pero recordó que hay libertad de opinión, y aunque no se esté “alineado” no significa que no haya compromiso con el movimiento y el gobierno.
La regidora del PVEM Alexa Hernández sostuvo que también ha sufrido actos de violencia por parte de la alcaldesa, así como discriminación y exclusión de las mesas de trabajo, e incluso cuestionó la labor e injerencia del hermano Vicente Ortega, ya que tiene participación en temas de proveeduría y administrativo.
“No hay algo en lo que él no esté metido, lo vimos en el problema de la huelga, en todas las reuniones estaba y le pasaba los documentos, entonces no sabemos qué papel esté jugando al interior del municipio”, observó.
La regidora del PAN, Valeria Martínez, enfatizó que no se trata de un tema de colores o partidos, puesto que cuando se busca silenciar una voz se daña la pluralidad y la esencia del servicio público, por lo que respaldó la denuncia, ya que también ha sido una constante los llamados a ser informados e integrados en los trabajos municipales.
Del PT, la regidora Marisa Vázquez Morán, subrayó que es constante el llamado para trabajar en equipo y persiste la exclusión.