Meta cree que los padres deben aprobar la descarga de aplicaciones que hagan sus hijos menores de edad, una medida que en su consideración notifica a los padres de esta acción, verifica la edad del menor y se preserva su privacidad.
Los niños y adolescentes utilizan los teléfonos móviles y acceden a aplicaciones y servicios digitales. Es una realidad a la que la legislación de distintos países intenta adecuarse para garantizar que su experiencia en línea sea segura y acorde a su edad.
También puedes leer: Padres culpan a sus hijos por hacer mal uso de internet y redes sociales
“Se necesita legislación para que todas las aplicaciones que usan los adolescentes puedan cumplir con el mismo estándar. Pero lo que está sucediendo es mucho más complicado que eso”, apunta la directora global de seguridad de Meta, Antigone Davis, en un comunicado.
Esta directiva cuenta que entregó su primer celular a su hija cuando cumplió 12 años, una decisión que “no fue fácil” y que supuso cierta angustia por “saber si era el momento adecuado”.
Con este ejemplo personal busca reflejar la preocupación de los padres no solo por el bienestar de sus hijos en lugares del día a día, como el colegio, el patio en el recreo o un centro deportivo, sino también en “sus vidas online”.
Desde Meta entienden que “como industria”, deberían trabajar con los legisladores “para crear formas simples y eficientes para que los padres supervisen las experiencias en línea de sus hijos adolescentes”.
Su propuesta es una ley federal en Estados Unidos que recoja que los padres “deben aprobar las descargas de aplicaciones de sus hijos adolescentes”. De esta forma, cada vez que un menor de 16 años quiera descargar una ‘app’, las tiendas de aplicaciones deberán obtener la aprobación de los padres.
Esta solución, entienden, exige notificar a los padres de la acción que quieren hacer sus hijos, para que puedan aprobarla, pudiendo de esta forma “asegurarse de que sus hijos adolescentes no accedan a contenidos o aplicaciones para adultos, o a aplicaciones que simplemente no quieren que utilicen”.
“Esta solución también ayuda a preservar la privacidad”, asegura la directiva de Meta. Esto se debe a que “al verificar la edad de un adolescente en la tienda de aplicaciones, no se requeriría que las aplicaciones individuales recopilen información de identificación potencialmente confidencial”.