Los ministros de Defensa de la OTAN pactarán mañana, en esta capital, fortalecer su presencia terrestre en Rumanía y Bulgaria, como parte de la respuesta aliada al creciente despliegue militar de Rusia.
De acuerdo con el embajador de Estados Unidos ante la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Douglas Lute, se desplegará en Rumanía una brigada multinacional con la participación permanente de fuerzas búlgaras.
Dicha brigada coordinará la realización de ejercicios militares tanto en Rumanía como en Bulgaria, de los que participarán Estados Unidos y otros aliados.
La OTAN ya aprobó en julio pasado, durante la cumbre de Varsovia, la movilización de fuerzas de intervención rápida en Polonia, Letonia, Lituania y Estonia.
Reunidos en Bruselas hasta el jueves, los titulares de Defensa deben analizar ahora las necesidades en materia de infraestructura para que esas tropas puedan desplegarse de manera inmediata en situaciones de crisis.
Se espera que Estados Unidos, Alemania, Reino Unido y Canadá, que formarán dichas tropas, definan una agenda para el envío de sus efectivos a principios de 2017.
La alianza atlántica también tiene previsto pactar una respuesta al despliegue de misiles rusos del tipo Iskander en la región de Kaliningrado.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, sostuvo que es “importante” que la organización reaccione a la decisión de Moscú, aunque “no de manera excesiva”.
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