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Amigos de Publimetro, como siempre es un gusto saludarlos en este espacio. Hoy tenía planeado hablar acerca del nuevo técnico nacional y del partido contra Estados Unidos, el tema más relevante de la semana. Sin embargo, he decidido contarles algo diferente y hablar de mi experiencia con Usain Bolt en su visita a México.
El miércoles llegó el hombre más rápido del mundo a México procedente de Los Ángeles, EU, después de haber visitado el famoso show de Ellen Degeneres el día anterior. Desde 2009 no visitaba nuestro país. Acompañado de su gente llegó al hotel y de ahí asistimos al evento de Puma México en Liverpool Polanco. Llegamos y había muchísima gente que ya lo estaba esperando con revistas y suvenires buscando la posibilidad de que Usain los firmara.
El evento empezó con una conferencia de prensa. Se tocaron varios temas, algunos repetitivos o sobre cosas que él ya había comentado en ocasiones anteriores como el tema de su retiro. Pero también habló de temas interesantes de fútbol que es otra de sus grandes pasiones. Sobre el partido entre México y Estados Unidos buscando el repechaje, el jamaicano comentó que apoyaba a México y que esperaba ansioso que ganaran el partido.
Al terminar la conferencia nos movimos a una pequeña cancha para una reta entre dos atletas. En esta ocasión se enfrentaron Usain y el delantero del América Darío Pipa Benedetto, en un entretenido juego de fútbol rápido narrado por Luis García. Finalmente Bolt ganó el partido y se llevó un peculiar trofeo que dice quiere poner en Jamaica junto con todos sus reconocimientos.
Al terminar tuvo una sesión de entrevistas uno a uno con diversos medios y al final se tomó el tiempo para tomarse fotos con toda la gente que estaba ahí. Es sorpréndete el carisma y la paciencia que tiene para atender a sus fanáticos. Hablando con él le comenté lo increíble que era verlo interactuar con la gente. Me platicó que cuando ve a alguien que lo admira, se acuerda de cuando era importante para el ver a alguien famoso y de esa emoción que le causaba pedir un autógrafo o una foto y que siempre se trata de poner en ese lugar. Además de ser el atleta más destacado de la historia, es una persona muy humana, sencilla y con los pies en la tierra. Yo lo conocí en enero de este año cuando se llevó a cabo la presentación de los tenis Ignite en Nueva York y tuve la oportunidad de entrevistarlo y desde entonces se ha convertido en un gran amigo.
El fin de semana aposté con él para el partido del Manchester United y él Arsenal, nuestros dos equipos. Honestamente nunca pensé que el Arsenal iba a ganar este partido pero de igual manera pensé que sería interesante apostar con el. Afortunadamente para mí, dieron uno de sus mejores partidos y le terminaron ganando al Man U 3-0 con dos goles de Alexis Sánchez y uno de Özil, al minuto 19 estaría liquidado el partido y yo cobraría mi apuesta con el hombre más rápido del mundo. Nada mal para un domingo cualquiera.
A Usain no le pareció nada divertido que perdiera su equipo y mucho menos vestir una playera del Arsenal, pero como hombre de palabra que es, pagó su apuesta.
Con una camiseta del Arsenal y con su nombre y el número que lo ha llevado a la historia 9.58 en el dorsal, subió el video a Instagram y Twitter e instantáneamente se volvió viral en todo el mundo. Incluso el equipo del Arsenal reposteó el vídeo en su Instagram, orgullosos de su “nuevo hincha”.
Así las cosas… Yo me quedaré para siempre con ese recuerdo y con mi jersey del Arsenal firmado por el hombre más veloz de la historia.
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