La polémica envuelve al futbol de Bolivia después de que se celebró el que puede ser el partido más largo de la historia, al menos de dicho país, cuando se enfrentaron el Atlético Palmaflor en contra del Blooming, encuentro que llegó a su final después de 42 minutos agregados, entre otras situaciones raras que rodearon el juego.
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El primer hecho extraño fue el aplazamiento del juego, originalmente se realizaría el domingo, pero los árbitros que integraron el equipo que estaría en el VAR no lograron llegar a tiempo, por lo que se tuvo que disputar el lunes.
Con el juego en marcha, el Palmaflor se colocó al frente en el marcador 2-0 al minuto 82, cuatro minutos más tarde la escuadra del Blooming acortó distancias. Los minutos finales se jugaron bajo una fuerte lluvia que hizo que el partido se volviera más áspero y hubo una anotación que fue anulada después de una revisión en el VAR que duró 10 minutos.
Esta situación provocó que se alargará el encuentro, el cuarto árbitro anunció a través de la pizarra electrónica que se agregarían 10 minutos más; tiempo en el que el Blooming logró empatar a dos el juego. En un hecho insólito, se cumplieron más tiempo del anunciado y el árbitro no pitaba el final del encuentro.
El partido se extendió 42 minutos más, hasta que cayó el tercel gol que le regresó la victoria al Palmaflor 3-2 después de cumplirse un juego que duró 132 minutos y 46 segundos, que lo catalogan como el más largo de la historia.
Las suspicacias no se hicieron esperar al sospechar el amaño del juego, sobre todo cuando el equipo ganador pertenece al expresidente boliviano Evo Morales, quien celebró la victoria, pero condenó la situación en que está ocurrió. La federación de futbol del país sudamericano cesó de manera indefinida al cuerpo arbitral que se encuentra bajo una estricta investigación por sospecha de amaño de juegos.
