Netflix apostó todo y acertó con ‘La sociedad de la nieve’, cinta que no solamente se ha convertido en una de las más vistas de lo que va del año en la plataforma sino que ha hecho acreedora de varias y merecidas nominaciones esta temporada de premios. La cinta española ha competido contra grandes producciones en la categoría de Mejor película de habla no inglesa en los Globos de Oro y Mejor Película Extranjera en los Critics Choice Awards y se perfila para llevarse el Oscar a Mejor Película Internacional.
‘La sociedad de la nieve’, basada en el libro homónimo de Pablo Vierci, ha causado gran impacto por narrar la extraordinaria historia real del accidente aéreo de los Andes en 1972 y la valiente lucha de los pasajeros por la supervivencia a lo largo de 72 días brutales. Sólo 29 de sus 45 pasajeros sobrevivan al accidente pero 16 fueron rescatados.
No sólo se diferencía de sus versiones anteriores por la forma en la que se arriesgó al poner como narrador principal a uno de las personas que no sobrevivieron al incidente pero que fue pieza clave en el rescate de sus compañeros sino que además cuenta con una cinematografía y banda sonora espectacular. Eso sí, parece que esto no ha sido suficiente para llevarse los galardones de las categorías en las que ha sido nominada.
La película francesa a la que ‘La sociedad de la nieve’ no ha podido ganar
Si bien todas las apuestas estaban sobre ‘La sociedad de la nieve’, finalmente ha sido ‘Anatomía de una caída’ la cinta que ha estado arrasando en la temporada de premios como la “mejor película internacional”.
Tras recibir el Globo de Oro, la directora Justine Triet dio un emotivo agradecimiento a su elenco y dijo que la cinta había tratado de mostrar lo realmente difícil que es capturar la verdad. “Esta película trata sobre la verdad. La imposibilidad de capturarlo. Es construcción”, dijo.
‘Anatomía de una caída’ está protagonizada por Sandra Hüller como una escritora que vive con su marido y su hijo con discapacidad visual en un remoto pueblo de montaña de Francia. Cuando su marido es encontrado muerto fuera de su casa, la investigación se convierte en una investigación de asesinato y Sandra es acusada. La principal prueba en su contra aparentemente es la complejidad de su matrimonio, que es profundamente analizada en el juicio y el único testigo es su hijo.
El elemento de misterio de si una muerte fue accidental o deliberada pasa a un segundo plano frente al complejo interrogatorio de los forenses ambiguos que cuestionan si un niño ciego puede ser considerado un testigo confiable. También es una meditación sobre la naturaleza engañosa de la memoria, el dolor, la culpa, los conflictos matrimoniales y la responsabilidad parental.