Usar el aire acondicionado en exceso puede resultar contraproducente para tu salud y para el funcionamiento del auto, más si cometes estos errores.
A pesar de que los avances tecnológicos han ido mejorando sustancialmente para el desarrollo del sistema de aire acondicionado de los vehículos, es importante darle buen mantenimiento y uso.
Estos son los errores más comunes que cometemos al usar el aire acondicionado
Si eres de las personas que suele usar de manera regular el aire acondicionado, te recomendamos fijarte en los siguientes errores más comunes. No solo se trata de prenderlo a su máxima potencia y esperar a que enfríe o caliente.
Para evitar que se descomponga y darle una mejor calidad de vida, evita hacer lo siguiente.
- Encender el aire acondicionado inmediatamente
Subirte al vehículo y prender el aire acondicionado instantáneamente puede llegar a dañarlo mucho más rápido. Te recomendamos encenderlo una vez que el auto esté en marcha y poco a poco ir aumentando la temperatura.
- No abrir las ventanas
Generalmente cuando nos subimos, encendemos el aire acondicionado y ni siquiera hemos bajado las ventanas. De acuerdo a Ángel Suárez, Ingeniero del Centro Técnico de SEAT se recomienda siempre abrirlas durante un minuto antes de usar el sistema de calefacción o enfriado.
- Usar la recirculación del aire todo el tiempo
De acuerdo a Ángel Suárez, el uso constante del botón que activa la recirculación del aire es uno de los errores más comunes al momento de usar el aire acondicionado. Y es que el uso de este sistema provoca que los cristales se empañen más rápido, lo mejor será usar la opción auto.
- Dejarlo de usar por periodos largos de tiempo
Ni usarlo en exceso ni tampoco dejarlo de usar. Todos los sistemas de calefacción o enfriamiento del auto necesitan tener un uso y darles servicio.
- No acomodar las rendijas del aire
Si eres de los que prender el aire acondicionado al nivel máximo porque no te llega, te recomendamos prestar más atención a la dirección que están posicionadas las rendijas. En ocasiones, no ponemos atención a los pequeños detalles que hacen una gran diferencia.
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