No importa que tan cansado estés de los zapatos, conducir descalzo o incluso con sandalias podría generar graves consecuencias que te harán arrepentirte de esa decisión.
La conducción no es cualquier cosa, es una actividad que requiere poner todos los sentidos alerta en todo momento, además de usar la ropa adecuada. A esto nos referimos sobre todo del calzado que usas para manejar.

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Conducir descalzo es sumamente riesgoso
¿Alguna vez has conducido descalzo? A pesar de ser un tema obvio, hay algunas personas que sin pensarlo dos veces optan por quitarse los zapatos cuando se sienten cansados, o usar sandalias durante las vacaciones sin pensar en todos los riesgos que conlleva tomar el volante y oprimir el acelerador sin zapatos.
Conducir descalzo impide generar la fuerza y precisión necesaria sobre los pedales, por lo que cualquier movimiento en el acelerador o freno no sería el correcto. Ocasionando accidentes viales y lesiones corporales.

Por otro lado, conducir descalzo es sumamente antigénico pues al tener expuesto el pie con los pedales la suciedad puede provocar infecciones u hongos. Ahora bien, si estás en la playa o en algún lugar caluroso, por ningún motivo vayas a manejar con sandalias. Este tipo de zapato provoca muchos accidentes debido a la flexibilidad de los materiales.
El tipo de zapatos que ocupamos para manejar, puede ser un causante de riesgo. Para evitar accidentes automovilísticos, es importante que al momento de subirte a un auto para conducir lo hagas con tenis o zapatos que se ajusten a la perfección a tu pie y pedal.
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