Isaac Hernández se encuentra en su casa de Londres. Vive la cuarentena como gran parte de los mexicanos: sin salir a la calle. Por ahora, el bailarín mexicano aprovecha estos momentos para replantearse algunos proyectos a futuro.
“Utilizar el tiempo para construirme para volver a la base, para leer, pensar tiempo en casa, para conocer mejor a mi pareja, para hacer todas esas cosas que la misma vida, la rutina y las ambiciones nos han quitado. Me estoy haciendo amigo de mis sobrinos, estoy invirtiendo tiempo en eso por estos días. En realidad no sabemos a qué realidad nos vamos a encontrar cuando esto termine”, dijo en entrevista Isaac Hernández.
Preocupado, realista pero sobre todo creativo espera que se reactiven las actividades en beneficio de todos.
“Por ejemplo yo entiendo que la situación para Latinoamérica y México sea particularmente difícil, no lo digo yo lo dice el Banco de América, el crédito suizo y los fondos internacionales. Entiendo que los proyectos que quiera construir o que tengo pensado para México tiene que ser proyectos congruentes con la nueva realidad. La situación cambia cada día y es difícil ser objetivo en su totalidad, pero si es importante para mí recalcar que no podemos pensar que las cosas volverán a hacer exactamente lo mismo. Me parece responsable pensar que nos vamos a encontrar una realidad muy diferente, donde van a replantearse muchas cosas de la sociedad muchas prioridades van a cambiar y vamos a tener que sumar todos”.
Isaac Hernández compartió con Publimetro que en su vida necesita bailar para tener paz.
“Me di cuenta en estos días que no puedo dejar de bailar, que es lo que me da tranquilidad, libertad y por gusto lo que hace que mi mente funcione mejor. Es la posibilidad de hacer ejercicio, de sentir ese privilegio de bailar y eso no lo quiero dejar, eso me queda claro».
0 of 2
Balance entre la danza y la actuación
Isaac Hernández ha incursionado en el cine y las series, ambos proyectos tienen su estreno en pausa por la alerta sanitaria del coronavirus. Primero participó en el filme de Carlos Saura, El rey de todo el mundo y la miniserie Alguien tiene que morir de Manolo Caro.
«Me queda claro que quiero seguir actuando porque lo he extrañado mucho y me quedé con buen sabor de boca después de la experiencia con Manolo Caro en Netflix (Alguien tiene que morir), y ahora estoy con ganas de hacer algo más”.
Atraído por el género de acción
“Hay un par de proyectos que me llegaron que me parecen interesantes, pero todo sería basado en qué tan importante es el proyecto. Le he dicho Manolo (Caro) que quiero hacer algo de acción y nada más se ríe, me dice: ¡Que atrevido (risas)!’, pero me gusto mucho la fisicalidad de las escenas, correr, tirarme al pico y yo pedía hacer todo, no quería dobles. Definitivamente ya tengo el gusanito de la actuación muy encaminado y quiero seguir en ello”, quien agregó que la serie de Netflix se estrenará en octubre.
Política cultural
Contra corriente
“Me parece frustrante, es que siempre que se hace una reforma se tenga que destruir todo y que se van los avances. Me parece muy peligroso desechar absolutamente todo lo que existe y lo que se hizo antes. Esa mentalidad me pone nervioso, porque pueden llegar a arriesgar la formación de futuros creativos en México”.
México
“Me gustaría regresar a bailar a México, es mi escenario predilecto, donde más me gusta bailar y donde siento que debo bailar más que nunca . Trato de lo que hago en México sea digno representante de mi profesión”.
Federación de Industrias Creativas
“Estos días he estado pensando en la reestructuración de la Federación de Industrias Creativas que recientemente firmamos en México. Estoy replanteando todo el financiamiento del proyecto y cómo adaptarlo a las realidades que hasta por el momento podemos predecir hasta cierto punto. Entendiendo que el financiamiento inicial no podrá ser como se tenía pensado -precisamente- porque todos estaremos con recursos limitados. He encontrado la manera de reestructurar eso para hacerlo más rentables, rápidos y que la inversión pueda recuperarse más rápido”, dijo Isaac Hernández.
En sus palabras
«Ya van dos veces que bailo y actúo al mismo tiempo y ha sido un desgaste físico extraordinario. No sabes como me dolió regresar a bailar ballet ahora después de Netflix, fue agonía total, no sólo física sino mental».
«Siempre he sido muy crítico con mi trabajo, a pesar de que me sentía inseguro compartiendo créditos con personas como Carmen Maura, Cecilia Suárez, entre otros, entendía que podía hacer el personaje».